El cirujano de El Burgo de Osma que llegó a miembro de la Real Academia de Medicina y al que la muerte truncó una prometedora carrera
Ezequiel Martín de Pedro (1836-1875) fue autor de numerosos artículos científicos e introductor en España de las ideas del médico alemán Karl Ausgut Wsunderlich relativas a los procesos febriles
Ezequiel Martín de Pedro.
Se cumplieron, el pasado lunes, los 150 años de la muerte de un burgense desconocido para sus paisanos. ¿A quién nos referimos? Pues a Ezequiel Martín de Pedro del que deja constancia el «Libro octavo de bautismos» (1831-1850) de la parroquial de El Burgo de Osma, canónicamente erigida en la catedral de Osma, que el 9 de abril de 1836, sábado, a la una de la noche, nació Ezequiel, hijo de Domingo Martín, cirujano de la villa, y de María de Pedro. Abuelos paternos Gregorio Martín y Josefa de Marcos; maternos, Matías de Pedro, todos naturales de la villa de Retuerta, y Manuela Rubio, natural de Pineda de la Sierra, en el arzobispado de Burgos.
El domingo, 10 del mismo, Manuel Claudio Carrascosa, cura párroco de la única parroquia de la villa, hallándose la diócesis en sede vacante, bautizó solemnemente y puso al neonato los Santos Óleo y Crisma y el nombre a Ezequiel, a las nueve de la mañana. Fueron sus padrinos Bernardo Montero, preceptor de Gramática de la Villa, y Juliana Tejero, maestra en la misma, a quienes el clérigo advirtió el parentesco espiritual y demás obligaciones. Y para que constase lo firmó. La familia del que llegaría a ser médico militar, catedrático, investigador y escritor científico, debió salir al poco tiempo de la Villa Episcopal.
Ezequiel inició sus primeros estudios en Los Arcos (Navarra), continuando en el Instituto de Segunda Enseñanza de Pamplona, donde obtuvo premio ordinario en el primer año de los mismos para, en el mes de junio de 1854, graduarse de bachiller en Filosofía por la Universidad Literaria de Zaragoza. Poco después se matriculó en el Real Colegio de Medicina y Cirugía de San Carlos, de Madrid. En 1855-1857 será practicante, ayudante 2º de cirugía y ayudante de medicina en el Hospital general de Madrid. Obtuvo, en diciembre de ese año, el número uno en las oposiciones para alumno interno de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Madrid, en la que consiguió, 1859 el grado de bachiller, y en 1860, el de licenciado con nota de sobresaliente.
Los años 1861-1863 fue médico cirujano en Los Arcos, donde había ejercido su padre, lugar en el combatió con escasos medios una epidemia tifoidea, y del que salió para ingresar por oposición en el cuerpo de sanidad militar de Madrid. En 1864, también por oposición, ganó la plaza de 2º ayudante médico, con destino al 2º Batallón del Regimiento de Infantería de San Fernando.
En 1865 consiguió el doctorado en la Universidad Central y prestó sus servicios en el Batallón de Cazadores de Arapiles. En 1866 formó parte de la columna de operaciones del Tajo, a las órdenes del capitán general Echagüe. En mayo del mismo fue nombrado, previa oposición, catedrático supernumerario de Patología Médica de la Universidad de Santiago, pero renunció para ser médico titular de Beneficencia provincial del Hospital de San Carlos, en Madrid, donde introdujo las ideas fisiopatológicas y bacteriológicas contemporáneas, los métodos anatomopatológicos microscópicos, la termometría clínica, pruebas auxiliares de laboratorio y otros métodos diagnósticos modernos. Ya en 1867 ascendió a primer ayudante médico del primer batallón del Regimiento de Infantería de Extremadura.
En 1868, a raíz de las disposiciones del Gobierno Provisional sobre la libertad de enseñanza, fundó la Escuela Libre Teórico-Práctica de Medicina de Madrid, ubicada en el Hospital General, en la que impartió, por espacio de cinco años, clases de Patología y Clínica médica.
Una de sus principales contribuciones a la ciencia médica, al decir de Alejandro Balaústegui Fernández, del que son gran parte de los datos que ofrecemos, fue ser el introductor en España de las ideas del médico alemán Karl Ausgut Wsunderlich (1815-1877) sobre los procesos febriles y las temperaturas de los enfermos.
Como escritor publicó gran cantidad de trabajos sobre diversas cuestiones médicas entre las que podemos destacar los siguientes: «Nueva doctrina acerca del tétanos y de su curación» (1869), «Manual de Patología y clínica médicas» (1876), «Estudio de Teratología con motivo de un extraordinario caso de monstruo triple» (1879), sin olvidarnos de los numerosos artículos sobre la Calentura puerperal, la Tartamudez, la Teratología, la Pelagra, el Tétanos, etc. publicados en la revista científica «El Siglo Médico» durante los años 1866-1874.
El doctor Ezequiel Martín de Pedro, socio de número elegido por unanimidad de la Real Academia de Medicina, falleció en plena juventud a sus 39 años de edad, viudo y sin hijos, y se le enterró en el Sacramental de San Isidro. Dejó a la biblioteca de la Facultad de Medicina de la Complutense de Madrid 500 volúmenes.