Diputación, dispuesta a gestionar con la Junta el centro de las icnitas

La Diputación de Soria buscará la implicación de la Junta de Castilla y León, la Mancomunidad de Tierras Altas y el Ayuntamiento de Villar del Río para poder gestionar de manera conjunta el futuro centro de visitantes de las icnitas, según explicó ayer la vicepresidenta de la Diputación, Esther Pérez, una vez que la Junta de Castilla y León ha solicitado a la Institución Provincial un compromiso para gestionar este centro, una vez que esté construido.

Los responsables de la Diputación han mantenido reuniones con la Junta de Castilla y León, en las que se les dio a conocer que la Consejería de Cultura condiciona la inversión de un millón de euros en el centro a tener atada la gestión con las administraciones provinciales. Pérez criticó ayer duramente esta nueva posición del Gobierno regional. «Antes existía el compromiso de inversión sin ninguna condición y ahora la condicionan a que la gestión sea cofinanciada», puntualizó la vicepresidenta, quien se preguntó ayer que «a ver si ahora va a tener la culpa la Diputación que no se realicen las obras del centro».

En este sentido agregó que en la actualidad, la Diputación tiene capacidad para gestionar la actividad del Aula gracias a la financiación de la Junta de Castilla y León para contratar a personal que se encarga de la apertura durante temporadas altas, como verano y puentes festivos, «para una gestión del futuro centro se tiene que estudiar y se necesita la colaboración de la Junta, la Mancomunidad y el Ayuntamiento de Villar del Río».

Pérez aseguró ayer que «la Diputación va a poner de su parte para abrir el centro» y de poner así en valor un recurso que es muy destacado y muy importante en la zona.

La Institución Provincial ha mantenido conversaciones con el presidente de la Mancomunidad de Tierras Altas, José María Valoria, porque considera que esta entidad cuenta, entre sus fines, la promoción turística en toda la zona.

Valoria manifestó que solo se ha llevado a cabo una reunión, pero, «de entrada la Mancomunidad está dispuesta a participar en la gestión». Los términos se tendrán que definir con el resto de las administraciones en sucesivas reuniones.

Por su parte, el alcalde de Villar del Río, Enrique Jiménez, aseguró que hasta ayer no había mantenido reunión oficial con representantes de ninguna administración. Jiménez puntualizó que la competencia en materia de Patrimonio corresponde a la Junta de Castilla y León y no al Ayuntamiento. En este sentido recordó que el Ayuntamiento se ha encargado, en los últimos ocho años, con la ayuda de la Diputación, de la gestión del Aula Paleontológica, desde su apertura con la contratación de empleados, la limpieza y el mantenimiento del centro.

La Consejería de Cultura y Turismo adjudicó a la empresa Dragados, S.A., por un importe de 962.441,34 euros, las obras de construcción del Centro de acogida de visitantes de los yacimientos de icnitas y restos fósiles, en Villar del Río, en octubre de 2015. Según los plazos de aquella primera adjudicación la obra tendría que haber estado ejecutada en 2016.Sin embargo, el proyecto se truncó unos meses después que la Consejería de Cultura decidiese rescindir el contrato con la adjudicataria por incumplimiento de contrato. La empresa solicitó una modificación de obra, que señalaba un incremento significativo del precio de adjudicación que el Gobierno regional no estaba dispuesto a asumir.

Esta decisión frenó el proyecto porque la empresa llevó a los tribunales el litigio que una vez resuelto ha decidido retomar su ejecución este año, paro lo que se consignó una partida de 662.500 euros en los Presupuestos regionales.

Durante el periodo de litigio también permaneció cerrada al público el Aula Paleontológica, dado que el Ayuntamiento había cedido los terrenos a la Junta de Castilla y León para acometer las obras porque la ampliación incluía las infraestructuras actuales que se utilizan para recibir a los visitantes.

La Consejería de Cultura mantendrá el proyecto sobre el que se iba a construir el centro, que pertenece al arquitecto Félix Escribano, con el que se va a dotar de un espacio expositivo, aprovechando la actual Aula Paleontológica, sobre los yacimientos con huellas fósiles de dinosaurios y otros reptiles que se formaron a comienzos del Cretácico (hace unos 140 millones de años). En total están localizados más de un centenar de yacimientos, que constituyen uno de los conjuntos más ricos e interesantes de la Península Ibérica.