Los infartos causan más de la mitad de las muertes

La Comunidad se muere. Según el informe sobre Defunciones según la Causa de la Muerte que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), la Comunidad perdió en 2015 a 29.302 personas, de las que más de la mitad – un 56,6%– murió a causa de un infarto y un 26,8% por cáncer.

El envejecimiento de Castilla y León la posiciona además entre los primeros puestos del ranking nacional de mortalidad, en concreto en el segundo puesto, con 1.189 muertes por cada 100.000 habitantes en 2015, detrás de las 1.298 de Asturias. Estas cifras corresponden a la tasa bruta, es decir, el número total de muertes. Sin embargo, si se elimina el envejecimiento de la Comunidad y se estandariza la pirámide poblacional – equiparándola con la media europea – el resultado cambia de forma drástica, pues la Comunidad pasa al tercer puesto por la cola. Estos datos demuestran que la razón principal por la que la población se muere en Castilla y León es la vejez, lo que la diferencia de otras comunidades autónomas.

Galicia es otra de las comunidades que tiene una tasa elevada de fallecidos (1.162), mientras que Canarias (710.1), Melilla (609.4) y Ceuta (596.6) tienen las tasas más bajas.

Melilla es otra de las comunidades que cambia su posición en la clasificación, ya que pasa de ocupar uno de los últimos puestos respecto a la tasa bruta y lidera la lista en cuanto a la tasa estandarizada. El resto de autonomías mantiene sus puestos, excepto algunas variaciones.

Los datos muestran que la mortalidad aumentó en 2015 en todas las regiones salvo en Ceuta. Los mayores incrementos se dieron en Castilla la Mancha, con un aumento del 9.1%, Andalucía (8.5%) y la Comunidad de Madrid, que sube un 8.4% las defunciones.

Respecto al número de defunciones por sexo en la Comunidad, no existe una gran diferencia entre hombres y mujeres. Aunque es el género masculino el que más murió en 2015 –14.776–, sólo se diferencia de las mujeres (14.526) en 250 muertes.

De Castilla y León, León y Valladolid son las provincias en las que más muertes hay con 6.218 y 5.194 respectivamente. Además, son las mismas ciudades en las que el cáncer y los infartos son las causas principales de la muerte seguidas de Salamanca y Burgos.

ÁVILA. La ciudad abulense posee un total de 2.146 muertes en 2015, de las que 552 fueron debidas a la enfermedad de moda, el cáncer, mientras que los infartos se llevaron a 596 personas.

BURGOS. 3.865 habitantes fueron víctimas de la parca. De esta cifra 1.051 y 1.062 murieron a causa de tumores y paradas cardiacas respectivamente.

LEÓN. Los leoneses se encuentran en lo alto de la clasificación de mortalidad, ya que 6.218 personas murieron en 2015.

PALENCIA. La provincia sufrió la baja de 2.156 personas, de las cuales 572 fallecieron a causa del cáncer y 668 por una parada cardiaca.

SALAMANCA. 3.973 habitantes de Salamanca murieron hace dos años (1.295 por un infarto y 1.063 por cáncer).

SEGOVIA. La muerte se llevó en la provincia segoviana 1.814 personas, de las que 494 fueron por tumores y 513 por infarto.

SORIA. Los infartos se llevaron en Soria a 363 personas y los tumores a 309, de un total de 1.189 defunciones en 2015.

VALLADOLID. La capital de la comunidad junto con León es de las provincias en las que más muertes hubo en 2015. 5.194 personas fallecieron ese año, de las cuales 1.523 fueron a causa del cáncer, mientras que 1.536 murieron por una parada cardiaca.

ZAMORA. Los zamoranos también tuvieron en 2015 una tasa alta de mortalidad, ya que fallecieron 2.747 personas. De esta cifra se desglosan muertes a causa de un infarto 865 y 653 debido a un tumor.