'Es el partido más especial de los últimos años'

 En su historia reciente, el C.D. Numancia ha tenido en sus filas muchos de sus jugadores. Algunos pasaron sin pena ni gloria, otros cumplieron como profesionales sin más y otros dejaron huella en la entidad rojilla y sus aficionados. De estos últimos, uno de los más representativos, posiblemente el más representativo de todos, ha sido Txomin Nagore. El centrocampista navarro milita ahora en un Mirandés que el sábado visita el municipal de Los Pajaritos y lo hace en la competición que en realidad importa, una Segunda División en la que los burgaleses se están jugando la permanencia en la categoría. «Para el Mirandés es clave que jugadores como Julio Álvarez o Juanma no jueguen. No vamos a descubrir ahora el peligro que tienen a balón parado», indica el navarro.

Las nueve temporadas en la que Txomin Nagore militó en el Numancia le hacen ser uno de los jugadores más representativos de la historia del Numancia. En su primera etapa fue pieza clave en uno de los mayores éxitos del club soriano, la permanencia en Primera División. En su segunda etapa, donde jugó las siete últimas temporadas hasta recalar en el Mirandés, lo hizo a un gran nivel convirtiéndose en santo y seña de la afición numantina. «No sé como me van a recibir. Sólo sé que mis nueve temporadas en el Numancia fueron mis mejores años como futbolista.  Independientemente de que juegue o no, el partido del sábado es para mí el más especial de todos estos últimos años», indicaba ayer el centrocampista numantino quien reconoce que ya ha recibido llamadas de ex compañeros y amigos ante el compromiso del sábado.

La precaución de Nagore sobre su presencia o no en el césped de Los Pajaritos es normal. En los últimos encuentros no ha entrado mucho en los planes de Carlos Terrazas y de ahí la lógica prudencia si bien, todo hay que decirlo, la ausencia de Iván Agustín aumenta sus posibilidades de estar sobre el terreno de juego. 

El conjunto burgalés llega a Soria con la necesidad de puntuar ya que se encuentra a un punto del descenso. Lo hace además tras encajar un 1-4 en casa que escuece si bien Nagore asegura desconocer si eso les hace o no más peligrosos: «Que te metan un 1-4 escuece independientemente de que te lo haga el líder. En Anduva estábamos bien y llevábamos cuatro partidos sin encajar un gol. Te meten cuatro y parece que se va todo al traste. No sé si ese resultado nos hace más peligrosos o no. Hay que gente que cree que es así y gente que cree que una buena racha te hace un equipo más complicado. Personalmente soy de los que cree que cuantos más resultados positivos encadenes mejor». 

«Nosotros no estamos en una situación cómoda al estar un punto por encima del descenso. No voy a decir que es un partido clave porque quedan jornadas por delante pero cada vez quedan menos partidos por lo que no tienes mucho margen de error y cualquier fallo o cualquier punto puede ser primordial», añade el navarro. 

Sobre su ex equipo y sus excompañeros, Nagore afirma que los ve bien dentro de una competición que en su carrera como profesional nunca había visto tan igualada. «Cuando se juega la temporada es en marzo y están en una posición ideal. Toda la Liga han estado en puestos buenos, siguen en una situación cómoda y mirando hacia arriba», indica el centrocampista. ¿Y los ve en promoción? Nagore indica que ya han estado en esos puestos a lo largo de la temporada y apunta al bloque como una de las ventajas de los numantinos: «Para mí, lo bueno que tiene es que tiene un bloque desde hace varios años atrás. Muchos jugadores se conocen y eso es una ventaja». 

Entre esos jugadores que llevan varios años se encuentra Julio Álvarez. Nagore no da muchas pistas sobre dónde puede estar la clave del partido pero no esconde que la baja del hispanovenezolano es buena para los intereses de su equipo: «Para el Mirandés es clave que no juegue Julio Álvarez, un jugador al que no vamos a descubrir ahora. Es importante que no juegue él o que no lo haga Juanma ya que son futbolistas insustituibles y muy peligrosos a balón parado. Luego, el juego puede ser muy parejo». 

Por último, Nagore reconoce que existen similitudes entre el Numancia y el Mirandés al tratarse de dos equipos humildes en el que se respira un entorno familiar. «He tenido la suerte de jugar muchos años en el Numancia y sé como funciona. Aquí encuentro muchas similitudes y también diferencias. El Numancia es un equipo ya consolidado en Segunda que ha estado en Primera. Lleva muchas temporadas seguidas y eso la hacer ser un equipo respetado. El Mirandés quiere seguir ese camino aunque no es fácil. Todo depende del éxito deportivo del equipo para mantener la categoría. Esa tranquilidad deportiva se traduciría en tranquilidad institucional y viceversa», señala. Y eso, algo de tranquilidad, es lo que buscará el Mirandés el sábado en Los Pajaritos.