El sueño del sufflé catalán
LA BIBLIA narra como José, hijo de Jacob, soñó que ‘el sol, la luna y once estrellas se postraban ante él’, claro que José no era Arturo Mas y la Biblia no es propaganda de la Generalidad. Napoleón, en los días previos a la batalla de Waterloo, soñó – lo dejó escrito –en dos ocasiones con un gato negro, símbolo tradicional del infortunio, y la derrota en la batalla significó su fin. Los sueños, en todas las culturas, ahora y siempre, tienen un no se qué interpretativo que hace que se les respete con más temor que alegría. Hay un discurso precioso de M Luther King, ‘Tengo un sueño’, que marcó un antes y un después reivindicativo tras su lectura en la marcha sobre Washington el 28 de agosto de 1.963. Sueños llamaba Quevedo a sus fantasías de tipo literario, y, sueños tenía don A. Machado que soñaba incluso despierto: «Era un niño que soñaba / una caballo de cartón. / Abrió los ojos el niño / y el caballito no vió…», símil que me hace pensar en la quimera del independentismo catalán que hoy, pase lo que pase, no lo verán sus ojos por que han diseñado un artificio en su hoguera de las vanidades: «Las figurillas sutiles / que pone un titerero en su retablo», el teatrillo de personajes como decía el esposo de Leonor ( XXX,67).
Hoy, es día clave en la Historia reciente de España y, estoy seguro, de que no pasará a mayores esta ensoñación catalana plena de una fantasía de deseos y esperanzas que no verán cumplida porque, una idea no ejecutada es un sueño y, porque pocos sueños se hacen realidad ya que la mayoría, como es el caso, se roncan. Y metiéndonos ya en harina, ¿cuánto nos cuesta a los paganos de Montoro que Cataluña siga en España?, ¿que funcione su gobierno cada día?..., a pesar de lo que diga una tal Karmele Marchante, su musa, prodigioso fichaje intelectual o el titiritero Arturo que le da por la borroka de prédicas revolucionarias, muchas demenciales – que quitan el sueño a muchos españoles de bien – en su contagio con ‘compas’ antisistema y antítodo…, pues Cataluña nos sale por más de un ojo de la cara, descapitaliza el Tesoro español y como son insaciables continuarán en su desafío amenazando con el desastre en su órdago hacia el agujero negro de ‘desenchufarse’ de España. Servidor, les cortaría el pago solo de la luz, empezando por el palacio del obispo de Solsona y acabando por la maquinaria que genera el odio, la Generalidad. Si quieren envite, que lo tengan. Queremos el órdago y, a negociar el futuro.
Y es que los camaleones cambian de color pero siempre son camaleones porque la pela es la pela. ¿Cuántos años lleva España sufriendo su chantaje?, ¿cuántos de burla de las sentencias del Supremo, del Superior de Justicia Catalán, del Constitucional?, ¿cuántos de mofa a los símbolos de España, a nuestra lengua? Nunca renunciarán a su voracidad reivindicativa de dineros y más dineros.
Esta es su contumacia política. Su todo no es divisible pero el nuestro sí en lo que llaman su ‘hecho diferencial’, pero, seamos serios, ¿ diferentes?, ¿en qué?...ah, sí en su patología crecida en el odio hacia lo español mientras tienen la pasta en Liechtenstein o, en que ningún Pujol ha entrado en la cárcel. Este es el hecho diferencial. Su sueño, que no es el mío, es como un ‘sufflé’ de superioridad cuando es complejo de lo contrario que se les atragantará en cuanto se les cierre la espita del oxígeno de la pasta, del parné, de la guita, de los cuartos… que Montoro les da sin medida solidaria con el resto de España.