Una vida tranquila en una hermosa ciudad

La soriana Alicia Tarancón Romero lleva cinco años en Lund, una de las ciudades más antiguas de Suecia en la sureña provincia de Escania que cuenta con una gran universidad y con Ideon, el primer y mayor parque científico creado en el país para promover el desarrollo de empresas de alta tecnología. Esta ingeniera de comunicaciones de 29 años llegó a Suecia para disfrutar de una beca Erasmus, a terminar las últimas asignaturas de la carrera y a hacer el proyecto de fin de carrera. Ya han pasado cinco años desde entonces.

Alicia vive en Lund, al sur de Suecia y muy cerca de Malmö y Copenhague, y trabaja de software project manager en ST-Ericsson, una empresa que nació hace unos pocos años tras la fusión de Ericsson Mobile Platforms y ST-Microelectronics. El idioma no es ningún problema, ya que explica que «todo el mundo habla inglés. Hasta la abuelita más anciana del lugar puede entenderse en inglés. Uno de los motivos es que saben que su idioma es minoritario, pero sobre todo hay que decir que no doblan las películas ni las series extranjeras, por lo que están acostumbrados a escuchar hablar en inglés todo el tiempo en la tele, lo que lo hace normal y útil». «Pero el sueco es un idioma muy bonito y bastante sencillo y a mí siempre me ha gustado aprender idiomas, así que después de cinco años en Suecia también hablo el sueco sin problemas», afirma la soriana.

En cuanto su vida allí, Alicia destaca que es «muy tranquila. En invierno no estamos mucho en la calle por el frío, el hielo y la nieve, pero siempre salen planes para juntarnos unos cuantos amigos en alguna casa para ver una película o cenar, para salir a tomar algo a un bar o para ir a algún concierto. En verano, la ciudad es muy bonita para dar paseos y disfrutar de los pocos días de sol y calor». Alicia es una gran aficionada al deporte: juega en el equipo de voleibol de Lund en la liga regional con el que entrena al menos tres tardes cada semana y los fines de semana; y le gusta ir a nadar y a correr, hasta el punto de que está entrenando para correr una media maratón en mayo.

Esta ingeniera soriana comenta que «en Lund conoces gente de muchos países y eso es lo que más me gusta de vivir aquí. Es una ciudad especial gracias a su universidad, muy grande y conocida internacionalmente, y al parque tecnológico». Igualmente, destaca que su empresa es una compañía internacional, por lo que tiene amigos de España, Italia, Francia, Reino Unido, Australia, Alemania, USA, India, Japón... Además, cuenta con muchos amigos suecos, muchos de los cuales los conoció en su último año de carrera y otros los ha ido conociendo en el trabajo o por ser amigos de amigos. «Los suecos son muy callados y tranquilos, no es tan fácil entrar en su círculo de amigos como suele pasar en España. Pero por otro lado son una gente maravillosa y con muy buen corazón y una vez que creas amistad con ellos, sabes que los tienes para cualquier cosa que necesites...», explica Alicia.

Respecto a los españoles, comenta que «somos unos cuantos. Sevillanos, madrileños, valencianos, leoneses, malagueños e incluso otro chico de Soria al que conocimos por casualidad... En el trabajo solemos juntarnos todos los jueves un grupo de españoles y latinoamericanos para comer juntos en lo que llamamos ‘latino-luncho’ y también solemos salir juntos los fines de semana.

A la pregunta de qué destacaría de Suecia, no duda en contestar que la tranquilidad. «Aquí se vive muy bien y en el trabajo se preocupan mucho por tu bienestar. Mi ciudad es muy bonita y pequeña, vivo en el mismo centro. Es una maravilla simplemente salir a dar un paseo por las calles estrechas del centro, con casitas de colores y calles empedradas... Parece una ciudad de cuento». Entre las diferencias con España apunta el clima y afirma que «más que el frío, aquí el principal problema son las pocas horas de luz y el cielo nublado la mayor parte de los días y no se ve el sol. En invierno se hace de noche a las tres y media de la tarde... La verdad es que esto afecta bastante y creo que te falta energía y debido a ello aquí no se vive tanto en la calle como en España». Alicia explica que, en cierto modo, se cambia la energía de países como España por la tranquilidad de los países nórdicos.