‘Se podría haber vivido un drama en Pinar Grande’

Con resignación. Con mucha resignación y no con menos impotencia desgrana el agente medioambiental AM 03 las demoledoras conclusiones del informe sobre la acampada ilegal de ‘ravers’ del pasado mes de agosto.

El técnico de Mancomunidad de los 150 pueblos pide al resto de administraciones «estudiar su actuación», para «sacar conclusiones», y de paso, «para estar preparados en cómo debe actuar» en posteriores eventos de este tipo, invitando a «mejorar la coordinación». Así, recuerda los antecedentes de una convocatoria que se desarrolló de manera impune hace algunos veranos en Vinuesa, una experiencia que vaticina se sucederá en el futuro «lamentablemente». Aceptando la realidad, el agente alerta de que «los convocantes ya han sacado adelante dos fiestas».

También admite que «se barajó la posibilidad de decomisar los grupos electrógenos», para mermar las intenciones de los ‘ravers’, aunque no se llevó a cabo. «Nos hacía falta el respaldo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado», pero los propios agentes medioambientales, desarmados, no pudieron ante el peligro de su integridad física. Cuando se planteó, requería la presencia de un mayor número de efectivos que se estaban viendo desbordados, «como más adelante se comprobó al tener que abrir la pista forestal ante los disturbios que se estaban desarrollando y dejar entrar a todos los vehículos a la zona de la acampada ilegal».

Además, alude a la concienciación ciudadana de los vecinos de la zona: «nos costará mucho esfuerzo mentalizar en el respeto a la autoridad y al Estado de derecho». En esta ocasión, y quizás sea lo más alarmante de las conclusiones finales, las consecuencias de la ‘Spaintek 2011’ pudieron tener unos efectos devastadores para Pinar Grande y para la zona del pantano. Se hace mención a la «suerte», reseñando los antecedentes climatológicos de la zona en aquellos días, «con una semana previa de fuerte calor», y con el aumento en el riesgo de incendio forestal, al constatarse «que se ha hecho fuego debajo del arbolado».

Además no faltan otros agravantes, como «combustible almacenado» y grupos electrógenos funcionando ininterrumpidamente. Una irresponsabilidad acentuada aún más con «2.000 personas con un porcentaje muy alto de ellas drogadas» fuera de control, «fumando», y la existencia de hornillos.

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