LOTERÍA DE NAVIDAD
Un reguero de agraciados en siete provincias de Castilla y León
Fiesta en Las Casas. VALENTÍN GUISANDE-
El sorteo de Navidad dejó ayer un reguero de agraciados en Castilla y León. Siete premios merodearon por la Comunidad y regaron rincones de siete provincias con casi 275 millones de euros, al margen de las pedreas. Ávila y Palencia vieron pasar de largo la suerte.
Aranda de Duero se llevó la palma. La administración número dos, Loterías Mayte, ubicada en la plaza de Santa María, vendió íntegramente el segundo premio y repartió 250 millones de euros en 180 series.
La Peña El Chilindrón, de la localidad ribereña, repartió entre socios propios y de otras peñas 1700 décimos, premiados cada uno con 125.000 euros. Haciendo honor a su nombre, la Peña El Puntazo, de la localidad segoviana de Ayllón, se apuntó uno [un puntazo] al distribuir en papeletas otros cien décimos del 42.260, adquiridos en Aranda.
La ciudad burgalesa, una de las cunas de Ribera del Duero, lleva años bendecida por la suerte del bombo. Pero tampoco le anda a la zaga Soria, que también tiene experiencia repartiendo millones y ayer sumó otro grado.
En la capital, la administración de la calle El Collado, número dos, vendió 26 series del 64.084, tercer premio. Repartió 13 millones de euros, y la mayoría fue a parar a la asociación Virgen de las Mercedes, del barrio Las Casas.
En la provincia, el Burgo de Osma se topó con el Gordo que, en total, en toda Comunidad, dejó 7,2 millones. La oficina número dos, ubicada en la Plaza Mayor, despachó diez décimos del 76.058, premiados con 400.000 euros cada uno. La mayoría se dispensaron a través de internet, pero, según el testimonio del lotero, Félix Molero, «tres o cuatro» se despacharon en ventanilla la víspera del sorteo.
Cinco provincias más repartieron millones del premio más suculento de la lotería de Navidad, aunque a cuentagotas, en ocho décimos.
En la pequeña localidad segoviana de Fuentepelayo, entre tapa, pincho y caña, el bar El Salvador vendió en terminal dos décimos del 76.058. Sin conocer la identidad de los nuevos millonarios, sus propietarios, Juan Pedro y Merce, sólo acertaron a desear que el premio se quedara en el pueblo. «Como en todos los sitios, aquí muchas personas tampoco lo están pasando bien», explicaron en declaraciones a Ical.
Salamanca rompió por primera vez su gafe con el Gordo y repartió dos décimos, 800.000 euros. Un boleto vendieron la administración número dos de Olmedo (Valladolid), y en despachos receptores de Aranda de Duero (Burgos), Valladolid capital y La Robla (León).
El tercer premio también visitó varias provincias de Castilla y León. Además de las 26 series del 64.084 despachadas en Soria, la administración dos de Ponferrada vendió una. Tras repartir medio millón de euros, la hija de la lotera, Marieta Hernández, se mostró «eufórica» por la noticia, ya que, según recordó a Ical, este verano cumple 30 años al frente del negocio y nunca había repartido un premio importante. La hija de la lotera afirmó haber identificado a una de las premiadas, «una chica muy joven» que compró el décimo en el puente de diciembre y que «lo comparte con dos amigas».
De los ocho quintos premios del sorteo, cuatro dejaron su rastro en distintas provincias. El chaparrón de millones cayó en Valladolid con el 24.616. La administración del centro comercial Vallsur vendió 15 series y repartió 900.000 euros.
La suerte en la provincia de Zamora recaló en Benavente. La administración número dos repartió 60.000 euros en diez décimos en ventanilla del 49.257. «Hemos dado unos cuantos premios en estos últimos tiempos y la gente se anima», señaló a Ical Carlos López, empleado de la oficina. En Villarcayo, Burgos, ayer cogieron cariño al 24.616. Allí se vendieron diez décimos de este quinto, 960.000 euros.
El 22.343 dejó 6.000 euros (un décimo) en Puebla de Sanabria (Zamora) y Villablino (León), y el 11.419 repartió 24.000 euros en Salamanca, Burgos y Medina del Campo (Valladolid).