Jonathan Heredia: "No siempre llega el que más trabaja"

Unos cuantos peldaños más arriba se habla estos días de millones como si una suela fuera oro fundido. Y él, que que se pagó el carné a plazos, relativiza las cifras e intenta hacer lo mismo con la crítica que sube y baja. Hoy ya no conduce su primer coche y se contradice al decir que la vida no le ha tratado demasiado bien. Aún así da gracias a las seis que le quedan y, por si acaso, reza. Hablamos con Jonathan Heredia Ruiz (Ciudad Real, 1986) de fútbol, vitalidad y otras cosas.

Pregunta.-¿Qué le hace invencible?

Respuesta.-Es que nadie es invencible. Pero mi actitud positiva me hace tirar hacia adelante y superar cosas como la que he tenido.

P.-¿Piensa en goles, en palos, en redes, en paradas?

R.-Casi siempre en paradas.

P.-Dígame qué le interesa.

R.-El éxito y el superar objetivos. (Perdón???) El éxito conlleva superar objetivos no?

P.-¿Qué ausencia no aposenta?

R.-Lógicamente de ausencia mi padre, que falleció cuando yo tenía 16 años. Incluso a mi madre, que la tengo en la distancia, también. A mi familia.

P.-Cuénteme una frustración.

R.-Frustración ha sido para mí, en cuanto a deporte, no haber podido llegar a jugar a nivel profesional.

P.-Lo más raro que le ha pasado después de todo.

R.-Mi vida no ha sido rara, sino difícil. Y gracias a eso me ha hecho ser como soy. ¿Lo más... raro? No sé, volviendo a lo de antes. Mi padre se me murió a mí, estaba ya solo con él.

P.-No sé si será del Barça, pero lo voy a dejar claro. #TodosSomosLeoMessi me parece un insulto.

R.-¿Por qué, por el tema de Hacienda? Creo que no hay que mezclar términos, no tiene nada que ver si un deportista es bueno o malo con lo que haga después en su vida normal, si ha hecho un fraude o ha estafado tendrá que pagarlo. Y sí, soy del Barça. Pero no hay que mezclar el deporte con lo otro. (Si usted lo dice).

P.-Algo que no sepa usted de usted.

R.-Como no lo sé... Me gustaría saber hasta dónde voy a poder llegar tanto a nivel laboral como deportivo. En lo deportivo lógicamente me queda muy poco para poder llegar a algo importante. Pero sí saber dónde podría llegar siendo constante en el trabajo como lo soy en el deporte.

P.-¿Por qué hay heridas que el tiempo no cura o sí?

R.-Creo que hay cosas que el tiempo no puede curar.

P.-¿Qué implica para usted vivir?

R.-Vivir es disfrutar y vivir el día a día con cabeza. Viviendo ilusiones a futuro, a corto y medio plazo, pero hay que disfrutar el momento porque nunca sabes cuándo te puedes marchar.

P.-¿Cómo quiere gastar el resto de sus vidas?

R.-Viviendo al día, cumpliendo objetivos, siendo feliz. Dándole sentido a la vida y gastar el cien por cien en todos los aspectos. Me gusta involucrarme con muchas aficiones e intentar disfrutar de cada una de ellas. Así le doy sentido, disfrutando, siendo feliz con mi personalidad, sin dejarme influenciar por lo que pueda pensar la gente.

P. ¿Qué regla necesita el fútbol?

R.-Un aficionado al final que falta al respeto y se mete con el futbolista. Un futbolista tiene que ser respetado por todo el trabajo que hay detrás.

P.-¿En qué ha cambiado Heredia desde el 19 de diciembre?

R.-Realmente en nada. Sigo siendo el mismo y haciendo las mismas cosas.

P.-Dígame un puñado de palabras de las 93.000 que hay en el RAE.

R.-Salud, amor, ilusión, esperanza.

P.-¿Comparte que las botas de un Messi o un Ronaldo valgan millones?

R.-Al final un futbolista cuesta lo que alguien quiera pagar por ellos. Si no hubiese nadie, un presidente, un club... que quisiera pagar esa cantidad por ellos, no lo valdría, lógicamente.

P.-¿Qué ha repensado después de su accidente?

R.-Que más que nunca tengo que luchar por lo que quiero y disfrutarlo. Y lo que pienso es que no tengo que centrarme solo en lo que me ha pasado, o refugiarse ahí; decir ‘mira qué pena’. Sino verlo como algo que ha sucedido, ha salido bien gracias a Dios y a partir de ahí ser positivo.

P.-¿A quién preguntaría por qué?

R.-Detesto un poco a la gente que es anti algo. A esas personas les preguntaría por qué son anti lo que sea, cuando se contradicen.

P.-Una lección.

R.-La lección de la vida. Las experiencias no vienen por la edad sino por las circunstancias vividas.

P.-Dos cosas esenciales.

R.-Haberme buscado la vida desde muy joven y sentir que no siempre la vida me ha tratado bien.

P.-Un referente.

R.-Referente como persona, mi padre. En lo deportivo, cualquier portero profesional.

P.-¿Qué hay que relativizar?

R.-Las cosas negativas. Ante una circunstancia negativa no doy demasiada importancia porque me puede llegar a minar o a hundir. Cuando me pasa algo negativo intento dedicarle el menor tiempo posible en mi cabeza para poder seguir avanzando y tirar hacia adelante.

P.-¿Qué se pregunta?

R.-Si realmente todo el esfuerzo que haces puede ser recompensado de alguna manera, tanto deportivamente, como en el trabajo, como en la vida. Muchas veces trabajas demasiado, en el deporte por ejemplo, y no llega siempre el que más trabaja, el que más lucha, el más constante. Llega el que llega, hay que tocarte con una varita. La gente cuando critica... eso deja mal sabor de boca porque anteriormente te han idolatrado.