Juicio a Tragsa para que pase ocho contratos eventuales de la BRIF a fijos discontinuos

El Juzgado de lo Social de Soria albergó ayer el juicio en el que ocho trabajadores de la empresa pública Tragsa solicitaban que su contrato pasase de ser eventual a fijo discontinuo. Aunque en esta ocasión la vista afectaba a prácticamente la mitad, son 15 los empleados que se encuentran en esta situación.

Según señalaron fuentes cercanas al proceso, el convenio de estos trabajadores señala que una vez que trabajan dos campañas de incendios como eventuales deberían pasar a ser fijos discontinuos. Sin embargo, en este caso, no se ha producido la conversión a pesar de cumplir el requisito estipulado en sus contratos laborales.

En la mañana de ayer no se personaron representantes de la empresa en el Juzgado de lo Social de Soria. No obstante, gracias a un acuerdo de la empresa pública, quedó representada con la presencia del abogado del Estado en Soria, un hecho que generó cierto malestar entre la parte denunciante al no encontrar al denunciado como ‘interlocutor’ en este asunto judicial. No obstante la vista sí que se pudo celebrar en un llamativo ambiente en los juzgados, dado que algunos de los presentes vestían la ropa amarilla de seguridad correspondiente a su puesto.

Según indicaron fuentes legales, no es la primera ocasión en la que Tragsa se ve envuelta en una denuncia de este tipo. De hecho apuntaron que ya hay sentencias previas por casos muy similares en las que se da la razón a los trabajadores y han tenido que pasar su contrato a la categoría laboral que ahora reclaman los ocho sorianos.

A juicio de estas fuentes «es una medida que afecta a mucha gente» y el requisito de haber cumplido dos campañas de incendios con contratos eventuales está registrado en todos los casos, por lo que la tercera debería efectuarse ya en la modalidad de fijo discontinuo, esto es, un contrato fijo pero sin abarcar todo el año natural.

Este juicio se suma a las peticiones del personal de la BRIF que les llevaron a la huelga este verano, aunque mantuvieron el servicio acudiendo a todos los incendios en los que fueron requeridos incluso de forma voluntaria fuera de su horario laboral. Según señalaron desde CCOO, «los trabajadores de la BRIF, pese a ser un cuerpo de élite para la extinción y prevención de incendios forestales, no están contratados con la categoría profesional de ‘Bombero forestal’ recogida en el Catálogo Nacional de Ocupaciones (CNO), sino como ‘Especialista BRIF’ que es una categoría que no existe en dicho catálogo y no tiene asociado ningún cuadro de enfermedades profesionales».