Los vecinos de la Barriada exigen adecentar la avenida de Valladolid

La Barriada es uno de los barrios más singulares de la ciudad y, como tal, tiene sus propias demandas. No obstante la primera es compartida por buena parte de la ciudad y pasa por dar solución al estado de deterioro de la avenida de Valladolid. «Demandas no tenemos muchas pero sí destacables, y la primera es la avenida de Valladolid», explica el veterano presidente de la Asociación de Vecinos, Ignacio Gutiérrez.

La falta de una clarificación sobre quién debe intervenir ha llevado a esta travesía a un alto grado de abandono. «Entre el Ayuntamiento y el Gobierno, el Gobierno y el Ayuntamiento está hecha un desastre», lamenta. «Cada día hay caídas» de peatones y «no sé cómo no hay más denuncias, porque las hay con consecuencias graves».

Por ello instó a que «se pongan de acuerdo y tomen cartas en el asunto» para reparar la travesía. En este sentido recordó que hay presupuestados 900.000 euros para este año y mostró su apuesta por que se puedan ejecutar de la mejor forma posible porque «esto ya clama al cielo», sentenció.

Otra de las inquietudes del colectivo es la «retirada de postes y cableado aéreo, sobre todo en la avenida Reyes Católicos». Al parecer, la información con la que cuenta la asociación señala que Telefónica estaba buscando un acuerdo con el Ayuntamiento para la instalación de fibra óptica, de forma que una vez abiertas las zanjas se pudiesen soterrar los cables.

De esta forma «los vecinos tendríamos acceso a la fibra óptica y se podrían soterrar los cables». No obstante «de momento parece que no hay acuerdo» y los cables, con sus correspondientes soportes, siguen afeando la zona.

Además se mantienen problemas clásicos que, sin embargo, parece que se van solucionando poco a poco. Es el caso del tráfico y la velocidad de los vehículos en determinados puntos, que «con los resaltes en la calle Albacete» parece mitigarse en parte».

También ha mejorado «el problema de las ramas de los árboles», que por su poco cuidado acababan atascando las canalizaciones y el alcantarillado». En la actualidad «parece que se lo han tomado en serio y en la Calle Albacete ya se ha hecho una buena poda» que Gutiérrez confía que prosiga por otras zonas de la Barriada.

Para cuestiones longevas, eso sí, está la ordenación urbanística del barrio. «El tema de la modificación urbanística del Plan General de La Barriada dicen que estará listo para abril y me parece demasiado precipitado, sobre todo porque este plan ya llega 20 años tarde», indica el presidente de la Asociación de Vecinos ante los últimos anuncios realizados por el Consistorio.

Debido a la «originalidad» del barrio, compuesto en su mayor parte por pequeñas viviendas unifamiliares de una planta, «metieron la pata con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) anterior al incluirlo como ‘viviendas unifamiliares adosadas’, porque no todas son iguales». En los últimos años «se ha ido de madre aunque dentro de la normativa y resolver en cuestión de días lo que se ha hecho en 20 años es complicado».

Asimismo persisten algunas complicaciones en la convivencia en temas como «los perros o el reciclaje. Pero realmente eso es más educación cívica que una problemática de barrio», señala el presidente de la Asociación de Vecinos con cierta resignación al comprobar que no es exclusivo del área.

A ello se suma que a pesar del alto número de inscritos en el colectivo «somos muchos numéricos, pero participativos pocos. Las asociaciones de vecinos como estas son intermediarias entre el vecindario y las administraciones. Ojalá vayamos viendo más participación», concluye Gutiérrez.