Cultura
La FDS despliega su abanico cultural
La exposición ‘Arquigrafías’ y la lección magistral de la científica Laia Alegret Badiola marcan el inicio de la programación estival organizada por la Fundación en Soria

El duque de Soria, Carlos Zurita, saluda al director general de Caja Rural de Soria, Domingo Barca, antes del inicio de la lección magistral.
El intenso verano cultural de Soria tiene ya activo a uno de sus principales atractivos. La Fundación Duques de Soria abrió ayer el amplio y variado programa de actividades con el que permite acercarse a diferentes disciplinas a lo largo de las próximas semanas. El punto inicial fue la inauguración de la exposición ‘Arquigrafías’ en el Palacio de La Audiencia y el remate llegó con la lección magistral a cargo de la científica Laia Alegret Badiola. A partir de ahora llegarán actividades académicas, seminarios, conferencias y las lecturas organizadas en el Centro Internacional Antonio Machado.
La Audiencia acoge desde ayer y hasta el 29 de julio la exposición ‘Arquigrafías’ de la arquitecta, Mariasun Salgado de la Rosa, que refleja sus inquietudes acerca del territorio, el espacio y los materiales, principalmente y representa los conflictos entre la arquitectura y el entorno, concretamente los que se derivan de la masificación urbana y la hiper-densidad. La muestra está comisariada por María López.
La arquitecta señaló que las piezas de la exposición buscan formas y relaciones con las matemáticas, el urbanismo y con lo que se ve a vista de pájaro. Asimismo, apuntó que cuenta con una colección de planchas de este formato que busca esta armonía y luego también el corte que simboliza el vacío que forma parte de la arquitectura y del territorio, según recoge Ical.
La lección magistral de este año de la programación de la FDS correspondió a la paleontóloga y académica de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad de Zaragoza, Laia Alegret Badiola.
Antes de su conferencia, Alegret Badiola auguró que el planeta Tierra y la vida en él permanecerán en un futuro remoto, pero «quizás» las condiciones climáticas no serán las idóneas para el homo sapiens, debido a la velocidad de emisiones de los gases invernadero y el calentamiento asociado, que «no tienen precedentes en 66 millones de años», según recoge Ical.
La científica abordó los procesos de cambio climático con base al pasado geológico, ya que, «analizar el cambio climático con series históricas, con lo que ha ocurrido en las últimas décadas, no es suficiente para ver si el hombre ha ejercido un cambio significativo sobre el clima del planeta».
Laia Alegret participó en la expedición a Zelandia, un continente sumergido bajo las aguas del Pacífico al 94 por ciento a 5.000 profundidades, por lo que los sondeos que extrajeron los investigadores del fondo marino fueron un «descubrimiento nuevo». «Los dos objetivos principales de la expedición era estudiar los cambios climáticos del pasado.
La investigadora contribuyó con el estudio de miles de microfósiles obtenidos en seis perforaciones del fondo marino del nuevo continente, con una superficie sumergida de unos cinco millones de kilómetros cuadrados. Los resultados de esos estudios cambiaron lo poco que se sabía sobre este continente oculto, según Laia Alegret. «Nos han permitido conocer cómo evolucionó como un continente independiente tras separarse de Australia y la Antártida hace 80 millones de años, cómo cambió la profundidad de sus mares a lo largo del tiempo, en qué momentos emergió y se hundió, condicionando las migraciones de las especies, las corrientes oceánicas y el clima global», indicó, según recoge Ical.