Sucesos
La Guardia Civil, alerta por una granada de mano hasta comprobar que era una réplica
Los agentes se movilizaron ante el aviso pero constató que no era un explosivo, sino una copia de plástico

Detalle de la granada hallada en Abioncillo y que finalmente se comprobó que era una réplica.
La aparición de explosivos abandonados en montes y desvanes de Soria es relativamente habitual. Esta vez a la Guardia Civil le tocó movilizarse ante el hallazgo de una granada de mano en un campo. Por suerte, esta vez no hubo que hacer explosiones controladas ni lanzar mayores alertas: acabó siendo una réplica.
Los hechos ocurrieron en Abioncillo de Calatañazor, cuando se dio la voz de alarma tras encontrar un artefacto que, por forma, coincidía con una granada de mano. Hasta el lugar se desplazaron numerosos vehículos y agentes de la Guardia Civil siguiendo un protocolo visto en varias ocasiones en la provincia.

Detalle de la intervención de la Guardia Civil.
Se acordonó el área a la espera de cerciorarse sobre el objeto, si realmente era un explosivo y si estaba activa, siempre con toda la cautela que se aplica en estos casos.

Provincia
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Heraldo-Diario de Soria
Finalmente, tal y como se comprobó y confirma la Subdelegación del Gobierno en Soria, resultó ser "una réplica de plástico", que tampoco es que 'pegase' mucho en el monte de un pueblo de Soria.
Aunque en este caso todo se resolvió sin mayores complicaciones, conviene recordar que, en caso de encontrar morteros, granadas, obuses o elementos similares, lo primero y principal es no tocarlos de ninguna manera. Ni con un palo. Se debe dar aviso a las autoridades quienes, a través de los especialistas, serán quienes determinen su naturaleza y el procedimiento necesario.
Ocurrió sin ir más lejos el pasado otoño de 2024, cuando un recolector de setas encontró una granada 'de verdad' en Duruelo de la Sierra; con la dinamita que apareció en una vivienda en Recuerda en 2023; con una granada de mortero localizada en 2022 en Sotillo del Rincón; con las balas de cañón, anticarro y una granada halladas en 2021 en Viana de Duero en casa de un familiar fallecido; con el proyectil de la Guerra Civil que apareció en 2020 en el Centro de Tratamiento de Residuos de Golmayo; con la granada de mortero encontrada en 2016 en Alcubilla de las Peñas...
En definitiva, hay casos más que suficientes como para mantener la prudencia en estas situaciones. Toca avisar a las autoridades y, si como en el caso de Abioncillo es una falsa alarma, siempre será mejor que un accidente.