La llegada de la manada abre en Ólvega las fiestas en honor al Cristo

La rebeldía de una de las vaquillas puso ayer el punto de emoción al quedar rezagada en una Saca rápida y bien organizada que supuso el punto de partida de las fiestas de Ólvega. Pruden Indurain será el encargado de leer esta tarde el pregón en compañía de la reina y las damas elegidas por los Quintos de 2007.

La Saca olvegueña volvió a recuperar la tradición de llevar el ganado bravo al pueblo en el día previo al inicio de las fiestas del Cristo. Ocho vaquillas, acompañadas de varios mansos y arropadas por los caballistas, salieron sobre la una de la tarde desde el polígono industrial de Ólvega. Tras un primer tramo por la carretera de Matalabreras, enfilaron la travesía del municipio al ritmo del galope de más de una veintena de caballos.

En este primer tramo una de las vaquillas quedó rezagada del resto de la manada obligando a los caballistas a romper la formación y repartir caballos entre los dos grupos de reses bravas. Mientras que el rebaño más numeroso realizó el recorrido sin incidencias, no ocurrió lo mismo con la vaquilla rebelde.

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