Los pasadores vencen a la lluvia y al fuego

Un total de 22 pasadores de San Pedro Manrique lucharon contra el agua y el fuego en la noche de San Juan para cumplir con el ancestral rito. La fuerte lluvia que cayó durante la tarde del lunes en la localidad soriana, donde se registraron hasta los 15 litros por metro cuadrado, hizo peligrar la celebración de la fiesta que con tanta emoción viven cada año los sampedranos.

La  hoguera se encendió sobre las 9.20 horas, con veinte minutos  de retraso respecto a la hora de años anteriores. Los cerca de 3.000  kilos de leña de roble estuvieron tapados bajo lonas esperando a que el temporal arreciase. Durante la tarde hubo dudas entre los pasadores por el estado del terreno, pero al final la hoguera estuvo lista a medianoche.

Al final la lluvia respetó a San Pedro, pero los organizadores del Paso del Fuego se tuvieron que emplear a fondo para arreglar el barrizal, en lo que se convirtió el recinto de la ermita de la Virgen de la Peña. En primer lugar se retiró todo el barro y el agua encharcada y  después se colocó arena seca, sobre todo en el inicio de la alfombra  de ascuas. Los expertos reconocieron que el agua y el barro entrañaban un gran peligro para los pasadores de San Pedro, por las graves quemaduras que pueden ocasionar  si el barro se queda pegado en la planta de los pies.