OLVEGA
Campofrío mantiene los 30 operarios de loncheados en la fábrica de Ólvega
Trabajadores de Burgos cuando llegaron a Ólvega hace dos años-A. M.
30 trabajadores de Campofrío de Burgos, de la sección de loncheados, son los únicos que quedan en la fábrica del grupo en Ólvega de los 75 que fueron recolocados hace dos años con motivo del incendio que arrasó la fábrica de la Bureba.
Este último grupo permanecerá en la localidad olvegueña hasta el mes de febrero o marzo, según explicó el responsable sindical de CC OO de la Bureba, Vicente Ramón Marijuán. Debido a las características del producto loncheado, sobre todo por la caducidad, es por lo que permanecerá la línea de producción en Ólvega. Cuando esté instalada la maquinaria en la nueva fábrica de Burgos es cuando se procederá al traslado de la producción.
Una operación similar se realizó cuando se implantó de manera temporal en Ólvega. Los operarios de loncheados fueron los últimos en incorporarse en las dependencias olvegueñas. Anteriormente lo hicieron los 44 especialistas en fabricación de embutido, a los que se sumaron seis personas de administración. Todos ellos se encuentran ya en Burgos. El último grupo de nueve personas dejó Ólvega el pasado lunes para trabajar en Burgos. La reincorporación del personal de embutidos se ha ido incorporando de manera paulatina durante los últimos meses.
Justo cuando se cumplieron los dos años del incendio en Burgos el grupo Campofrío estrenó las nuevas instalaciones esta semana con un acto al que acudieron el consejero Delegado de Campofrío, Ricardo Doehner; el presidente de la compañía, Pedro Ballvé y el director general para el sur de Europa y EEUU, Paulo Soares.
Un total de 318 trabajadores ya prestan servicios en la nueva fábrica, de tal manera que Campofrío ha cumplido con su compromiso. Sin embargo, desde el pasado día 16 se suspendió el ERTE de los 600 empleados de la plantilla a los que se les volvió a contratar, independientemente de su incorporación en la nueva planta, porque no todas las zonas de la instalación están plenamente operativas, como anunció la compañía.
En noviembre de 2014, la fabricante de embutidos se vio en la obligación de repartir la producción en los centros de trabajo que tenía en funcionamiento en otras provincias. Además de en Ólvega, también se desplazó parte de la producción a Valencia.
Los centros de trabajo de Campofrío en Ólvega mantienen una plantilla de 230 empleados, en las dos secciones: embutidos y pizzas. En estos centros de producción se mantendrán las líneas habituales que estaban instaladas antes de recibir a los compañeros de Burgos. En el centro de pizzas no hay cambios y en la fábrica de embutidos parece que tampoco los habrá. Antes hacía chorizo pequeño y las piezas grandes y el loncheado se centrarán de nuevo en Burgos. La producción no se va a deslocalizar, indicó Marijuán. En este sentido recordó que La Bureba «es el motor del grupo y esperamos que esté en pleno rendimiento en verano de 2017 y si es así seguro que repercutirá en el resto de las fábricas».
El responsable sindical reconoció que a la plantilla que se trasladó a Ólvega a trabajar hace dos años les costó adaptarse al ritmo de trabajo porque la fábrica estaba vieja. Sin embargo, para todo este grupo la experiencia ha sido positiva y agradecen el recibimiento de la sociedad olvegueña que les ha permitido tener una estancia agradable, dentro de las circunstancias por las que atravesó la plantilla de La Bureba ante el siniestro en la fábrica burgalesa.