El tripartito valora abrir otros 5 parques de bomberos nuevos

El tripartito de la Diputación ha comenzado a estudiar la prestación del servicio de prevención y extinción de incendios en la provincia para incorporar cambios que mejoren la efectividad y la prestación del servicio a los residentes de todas las poblaciones de la provincia.

El modelo que se ha comenzado a estudiar pasaría por tener operativos diez parques comarcales, cinco de nueva creación, que garantizarían el acceso en media hora a casi todos los núcleos de población. Eso se conseguiría manteniendo los cinco parques que ahora están en funcionamiento, Almazán, El Burgo, San Esteban, Ágreda y Ólvega a los que se deberían sumar otros cinco de nueva creación para cubrir Tierras Altas, Pinares, Arcos de Jalón, Gómara y la comarca de Montejo de Tiermes.

«Vamos a ver hasta dónde podemos llegar», manifestó el vicepresidente de la Diputación, José Antonio de Miguel Nieto, encargado del área en la Diputación. Indicó que la nueva redistribución conllevaría un adelgazamiento de medios materiales y humanos de parques comarcales que en la actualidad se encuentran próximos, como son El Burgo y San Esteban y Ágreda-Ólvega.

«En la actualidad cada uno de ellos están dotados con los mismos camiones y el mismo material, lo que no es muy lógico porque son parques que están muy próximos entre ellos», puntualizó De Miguel, que apuesta por mantener operativos los cinco parques que están abiertos y en funcionamiento en la actualidad, aunque alguno de ellos adelgazado de medios con el objetivo de reforzar los nuevos que también necesitarían de nuevas inversiones para contar con más medios materiales y de profesionales una vez que se incorporen a la red.

De Miguel también cuenta con la ayuda de los respectivos municipios para disponer de los locales necesarios para instalar el parque.

Los cinco parques actuales se han reforzado, en materia de personal, con diez nuevos bomberos profesionales en calidad de interinos hace unos meses, que se han sumado a los cinco jefes de parque, que eran los únicos profesionales contratados por la Diputación. Un servicio que está apoyado con personal voluntario y con profesionales del parque de la capital, estos últimos, a través de un convenio con el Ayuntamiento de Soria.

Para llevar a cabo esta nueva planificación se necesita una importante inversión que el equipo de Gobierno no ha cuantificado todavía, por lo que el tripartito pretende solicitar ayuda a la Junta de Castilla y León para hacer frente a los costes. Una propuesta que el equipo de Gobierno quiere abordar con el consejero de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones, cuya visita a Soria todavía está pendiente.

«No está claro que la extinción de incendios sea una competencia de la Diputación», manifestó De Miguel, quien agregó que confían en que la Junta de Castilla y León sea receptiva en esta petición «porque la Diputación cuenta con un presupuesto muy ajustado para poder hacer frente a esta ampliación, pero vamos a ver hasta dónde está dispuesta la Junta a aportar y ver hasta dónde podemos llegar», indicó De Miguel, quien agregó que «el tener más parques de bomberos dependerá de la disponibilidad económica que tengamos».

En referencia al convenio con el Ayuntamiento de la capital para cubrir con sus profesionales y los medios las localidades que se encuentran en un radio de 30 kilómetros de la capital, De Miguel señaló que, lo más seguro, es que se solicite una prórroga del mismo, dado que expira a finales de año. El convenio conlleva un pago anual de unos 600.000 euros por parte de la Diputación al Consistorio. El año pasado ya se acordó una prórroga de este convenio, dado que el anterior equipo de Gobierno tenía las mismas pretensiones, negociar con la Junta de Castilla y León dotación económica suficiente para poner en marcha un consorcio provincial de bomberos.