José Antonio Llera y Palmira Cañada, Premios Leonor y Gerardo Diego
Él es profesor de Literatura en la Autónoma de Madrid y ella, funcionaria de Justicia en la Comunidad Valenciana / El jurado, reunido en la Fundación Vicente Marín, contó con Álvaro Pombo
El jurado con el presidente de la Comisión de Cultura, Enrique Rubio, y Vicente Marín, de la fundación homónima.HDS
José Antonio Llera y Palmira Cañada son los ganadores de los premios de poesía Leonor y Gerardo Diego, que convoca anualmente la Diputación de Soria. Llera se alzado con el premio Leonor con la obra Tanatografía; mientras, Palmira Cañada se hizo con el Gerardo Diego, para autores noveles, por el poemario titulado Aguas rotas.
La Fundación Vicente Marín, en Bretún, acogió ayer el fallo del jurado de poesía de la edición XL Premio Leonor, dotado con 10.000 euros, y del XXXVII Premio Gerardo Diego para autores noveles, dotado con 5.000 euros.
Sobre el poemario de José Antonio Llera, Tanatografía, el jurado destacó que «se trata de un libro de búsqueda y reconstrucción de la identidad personal y colectiva, a través de un sujeto poético que integra en su brillante discurso los desafíos contemporáneos y la memoria rural, los referentes culturales y la afectividad más humana.
José Antonio Llera vive en Madrid y es profesor de Literatura en la Universidad Autónoma. Cuenta con una larga trayectoria de publicaciones, entre las que destacan cinco poemarios y siete monografías.
Mientras, sobre el poemario Aguas rotas, de Palmira Cañada Moreno, el jurado destacó que se trata de una exploración valiente de la condición femenina y una poderosa denuncia de la ancestral agresión patriarcal mediante un uso genuino del lenguaje.
Palmira Cañada vive en Valencia y es funcionaria de Justicia del Tribunal Superior de Justicia de esta comunidad autónoma.
El jurado estuvo compuesto por el reconocido escritor Álvaro Pombo; las poetas Julieta Valero y Vanesa Pérez-Sauquillo; el periodista Manuel Llorente; y Jesús Rubio, profesor universitario. Todos coincidieron en destacar «el alto nivel de los originales presentados a estos dos premios, y la dificultad de tener que elegir a uno de ellos como ganador». Así y con todo el fallo fue por unanimidad.
El jurado de estos premios, convocados por la Diputación a través del área de Cultura que dirige Enrique Rubio, también destacar la «grata sorpresa» que supuso a sus miembros conocer la Fundación Vicente Marín, donde se reunieron los dos últimos días para deliberar el fallo. Ensalzaron el lugar donde está enclavado, en Bretún, en plena sierra de las Tierras Altas y la riqueza artística y cultural que atesora la Fundación y que muestra a todo aquel interesado en la cultura y el arte, de Vicente Marín.