El Centro de la Cultura Escolar atraviesa una situación crítica y valora su traslado de Soria

El Centro Internacional de la Cultura Escolar (Ceince) atraviesa una situación crítica y la Asociación Schola Nostra, sus promotores, valora su traslado incluso fuera de la Castilla y León. 

Esta decisión supondría el cierre del centro ubicado en Berlanga de Duero (Soria), en la casa señorial del siglo XVI, donde nació el comunero Juan Padilla.

«Después de varias crisis estamos sobreviviendo muy mal», manifestó su director Agustín Escolano que indicó que en la actualidad el centro únicamente recibe una pequeña aportación económica de Caja Rural de Soria y de la Universidad de Burgos que resulta insuficiente para su sostenimiento, por lo que apunta que necesitaría de mayor apoyo institucional. 

Esta situación ha hecho replantearse su futuro en la localidad soriana, después de 20 años de andadura.

El Ceince abrió sus puertas en 2003 gracias al impulso entonces de la Junta de Castilla y León y de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez (grupo editorial Anaya). 

Es un centro integral de documentación e investigación de los aspectos relativos a la cultura de la escuela en el marco internacional.

El proyecto cultural está impulsado por la Asociación Schola Nostra, participada por profesores de las universidades de Valladolid, Salamanca y Burgos y al frente del mismo ha estado todo este tiempo Agustín Escolano, catedrático de la Universidad de Valladolid, propietario del inmueble que es la sede del centro.

Alberga una de las mejores colecciones de manuales escolares de los siglos XIX y XX que se conservan en España. 

Manuales

Un fondo que que alcanza los 60.000 manuales de una treintena de países, que ha ido creciendo de manera significativa a lo largo de las dos últimas décadas lo que ha posicionado al Ceince como un foro de referencia internacional en materia de manuales y documentación por el que el año pasado pasaron profesores de 56 países, con una especial afluencia de educadores españoles de 17 comunidades autónomas.

Cuenta con ejemplares muy antiguos, como una manual de un autor checo del año 1633 o un libro escolar japonés del año 1874. Entre las curiosidades que se pueden consultar hay cartillas de alfabetización para los milicianos que combatían en la Guerra Civil española, cartillas para escolares de Rusia, México y una pequeña biblioteca escolar de un indiano de Vinuesa (Soria).

A los manuales escolares se suma un destacado fondo de 300 tesis doctorales sobre materia educativa. Todo ello catalogado por el centro y que a su vez se encuentra integrado en el Centro Manes de la UNED y a través de él conectado a otras redes nacionales e internacionales. 

Cuenta también con toda una red de colaboradores que se extiende a un buen número de ámbitos universitarios del país y a otros sectores del sistema escolar y de la educación no formal

Exposiciones

El centro ofrece otras actividades como exposiciones. Cuenta con una permanente sobre la historia material y visual de la escuela en los dos últimos siglos y otras que tienen carácter temporal, como una relacionada con la figura de Juan Ramón Jiménez en la cultura escolar.

También acoge un programa cursos, seminarios y coloquios en los que el año pasado participaron 309 profesores e investigadores.

Entre ellos destaca un seminario sobre la Historia de la Inspección Educativa. La mujer en la Inspección y un ciclo de conferencias online sobre Innovaciones en la Historiografía de la Educación.