Los portavoces ven base para el acuerdo pero Tudanca y Fernández piden que se cumpla la norma

Los portavoces de los grupos Popular, Socialista y de Podemos y el viceportavoz de Ciudadanos coincidieron hoy en que Castilla y León cuenta con un buen Estatuto de Autonomía, que se puede mejorar, y valoraron que se parte de una buena base para el acuerdo en su cuarta reforma, aunque Luis Tudanca y Pablo Fernández pidieron que se cumpla lo recogido en la norma.

Carlos Fernández Carriedo (PP), Luis Tudanca (PSOE), Pablo Fernández (Podemos), David Castaño (Ciudadanos) y José Sarrión (IU) intervinieron en la mesa redonda sobre la ‘Jornada de reforma del Estatuto de Autonomía’ -moderada por el delegado de ABC José Luis Martín-, organizada por las Cortes como antesala de la conmemoración el 25 de febrero del 33 aniversario de la máxima norma de autogobierno.

Fernández Carriedo y Tudanca advirtieron de la incertidumbre de esta reforma por el escenario nuevo en Congreso y Senado, que tienen que ratificar la modificación que se plantee desde las Cortes de Castilla y León, y por la previsión de un cambio en la Constitución, mientras que Fernández y Castaño se mostraron optimistas en el acuerdo, aunque el líder de Podemos sí alertó de que se puede alargar.

El portavoz del Grupo Mixto, José Sarrión (IU), se desmarcó de que este sea el momento oportuno para una nueva reforma, de su utilidad y de que se vaya a mejorar la vida de los ciudadanos con una revisión de su máxima norma. Además, cuestionó que las medidas propuestas sobre regeneración sean efectivas para combatir la corrupción, pues añadió que ésta surge de quien se deja corromper y quien le compra.

Cumplir sin estar en la ley

“Ya me gustaría que no hiciera falta ponerlo como obligatorio”, afirmó Tudanca en relación al paquete de regeneración democrática, cuando muchas de las medidas están en los programas electorales. El portavoz socialista aseguró que no hay ninguna de esas iniciativas que el PSOE no haya cumplido y enumeró la celebración de primarias, la inegibilidad entre procurador y alcalde de capital de provincia o localidad de más de 20.000 habitantes, listas paritarias o debates electorales.

De la misma manera el líder de Podemos, Pablo Fernández, calificó de “fracaso de la clase política” que esas medidas se eleven ahora de rango por no cumplirlas en el ámbito interno los partidos o ante casos de corrupción que han llevado a un descrédito de los políticos. El portavoz de la nueva fuerza en las Cortes aseguró también que ellos las cumplen.

Sin “líneas rojas” afirmó el socialista que acuden a la negociación, donde ve acuerdo en las medidas de regeneración y en materia social, pero defendió que la limitación de mandatos, la supresión de los aforamientos de los procuradores o la reducción de los parlamentarios no recuperan la credibilidad de los ciudadanos, si no se cumple lo aprobado en anteriores reformas.

Fernández Carriedo apoyó que esas medidas se eleven de rango, aunque añadió que la Junta remitirá a las Cortes leyes para fomentar la calidad democráticas al considerar que no todo tiene que estar en el Estatuto. Igualmente, Tudanca y Fernández añadieron que la negociación no va a lastrar su capacidad de iniciativa en esa dirección y el primero recordó que en el próximo pleno llevará una PNL para que los alcaldes de núcleos de más de 20.000 habitantes no sean procuradores.

Anteriores reformas

Castaño calificó de “bueno” que se eleve el listón en calidad democrática y transparencia y estimó que no habrá dificultades para limitar mandatos a ocho años o suprimir los aforamientos, aunque sí observó más diferencias sobre una reforma de la ley Electoral -fue el único que la planteó- o la disolución del Consejo Consultivo. Sólo Sarrión expresó su escepticismo con el “éxito” de esas propuestas para atajar la corrupción y abogó por iniciativas de más calado, como regular los lobis para evitar tráfico de influencias.

En relación a las reformas anteriores, los cuatro primeros valoraron su eficacia, si bien Fernández Carriedo aprovechó para poner en valor la calidad de los servicios, idea que compartió Castaño, mientras que Tudanca replicó que Castilla y León no es una “Arcadia feliz” ya añadió que un Estatuto no es “ni un jarrón chino mi una norma petrea”.

El portavoz popular concluyó que si hay acuerdo no se tiene por qué dilatar la reforma y abogó por negociar sobre lo que les une, motivo por el que rechazó la circunscripción electoral autonómica única de Ciudadanos o el modelo de comarcas de IU, pero si dejó en la sala una reducción de procuradores que apoya su grupo. “El acuerdo será complejo si nos centramos en lo que nos separa”, indicó.

Fue Sarrión quien replicó sobre la propuesta de reducir procuradores con el argumento contrario a restar representatividad y a aplicar la austeridad a la democracia, mientras que pidió que no se confunda con esas iniciativas a los ciudadanos en relación a que se haga la misma labor con menos parlamentarios.

Los grupos están citados el próximo 8 de marzo para presentar sus propuestas sobre regeneración democrática, el primer bloque sobre el que han iniciado la negociación. En la reforma se plantea también contar con un suelo social e incluir el modelo de ordenación territorial.