El Grupo Herce tiene que remontar para ganar en Lugo (1-3)

Cunha y Olalla se convirtieron ayer en una auténtica pesadilla para el Arenal Emevé de Lugo en un encuentro en el que los sorianos sufrieron durante el primer y el segundo set, pero que encarrilaron perfectamente en el tercero con un potente juego de ataque que desarboló a los gallegos.

Linares y Schulz no tardaron en demostrar sus cualidades sobre la pista del Municipal de Deportes de Lugo, sorprendiendo a un Grupo Herce Soria al que le costaba mucho frenar el juego de su rival y que se veía pronto relegado en el marcador (5-1).

Pero los de Alberto Toribio los de no se dejaron llevar por los nervios, apretaron los dientes y asumieron riesgos en ataque para contrarrestar a su rival hasta conseguir darle la vuelta al electrónico (9-11).

No iba a durar mucho la alegría en las filas sorianas. Con Linares y Schulz de nuevo en pista los locales hacían añicos el bloqueo visitante y Arenal Emevé volvía a hacerse con el control del partido (20-18). De poco servía ya el tiempo muerto solicitado por Toribio, su equipo no conseguía reaccionar y los lucenses seguían abriendo brecha para anotarse la manga por 25-21.

Parecía que el guión iba a repetirse en el segundo cuarto después de que los locales volviesen a adelantarse pronto en el marcador (3-1). Jugaban al límite los gallegos para tratar de no dar opción a su rival, pero Soria aguantaba bien el tipo y metía una marcha mas, forzando los errores de su rival hasta igualar darle la vuelta al marcador (9-12). Le tocaba ahora al técnico local parar el partido en busca de soluciones, pero lo cierto es que, aunque Arenal Emevé conseguía frenar la escapada de los visitantes, el equipo de Toribio no daba tregua y gracias a su potente juego de ataque y a los puntos de Santos, Olalla y Villalba, conseguía mantener su ventaja en el luminoso para igualar el partido tras el 23-25.

Grupo Herce Soria tenía claro que el rival no iba a darle un respiro y desde el inicio del tercer set optó por un juego muy agresivo en la red que le permitió colocarse pronto por delante en el marcador. Un buen juego de equipo y un Cunha imparable a la hora de rematar los puntos daban alas a los castellano leoneses, que iban a toda máquina ampliando diferencias hasta colocar el 9-17 en el luminoso.

De nada le servían al técnico local sus cambios de ficha o tiempos muertos, y aunque parecía que conseguía generarle mas problemas al rival, los sorianos anotaban también los puntos largos y sentenciaban la manga con un mas que contundente 14-25.

Al cuadro gallego no le quedaba otra que poner toda la carne en el asador en la cuarta manga para tratar de evitar la victoria visitante. Salieron a por todas en un inicio de set marcado por los errores de uno y otro equipo, lo que hacían que el marcador se mantuviese igualado (7-7). esta vez fue Olalla el que acudió al rescate de los sorianos, mientras Emevé continuaba cometiendo errores que le condenaban a ir de nuevo por detrás (8-13). A partir de ahí a los sorianos les bastó con mantener la intensidad y no relajarse para anotarse el set y el partido con relativa comodidad.