Errejón: "Un proyecto de país no es ponerse detrás de banderas muy grandes"

La inmensa bandera de España utilizada por el líder del PSOE, Pedro Sánchez, en su ceremonia de proclamación como candidato a la presidencia del Gobierno sigue generando controversia. El secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, ha afeado este lunes al socialista lo trivial querer resolver los problemas del país tirando de marketing político. "Un proyecto de país no es ponerse detrás de banderas muy grandes, ni de la cultura del pelotazo, ni ir a Bruselas a recibir las recetas de Merkel", ha criticado.

El número dos de Podemos ha explicado que el proyecto de su partido es "una propuesta valiente" a largo plazo y ha reivindicado que su fuerza defiende el patriotismo desde el concepto de soberanía popular, en la cual las instituciones están al servicio de los ciudadanos. "Fuimos pioneros en la reivindicación de un patriotismo que no fuera patrioterismo", ha afirmado Errejón. "Defender un país no es poner muy grande la bandera, perfecto si se sienten cómodos, y nosotros lo respetamos mucho", ha explicado, pero ha reclamado que lo fundamental es que el Gobierno defienda a los sectores más golpeados por la crisis.

Íñigo Errejón se ha jactado de haber defendido desde el principio el concepto de patriotismo en el discurso político del cambio y de "abrir brecha" en este terreno. El dirigente considera que, por contra, la escenografía de Pedro Sánchez con la bandera española corresponde al miedo surgido tras la presión ejercida por el PP para tratar de trasladar una imagen radicalizada de los socialistas. "Uno podría pensar que el PSOE se ha asustado ante el tono de revista del partido en el Gobierno", ha considerado Errejón, que también ha cargado contra los cambios en el seno del PP para decir que los problemas en Génova no se solucionan con la incursión del gabinete presidencial en en el partido.

MIEDO A GRECIA

El secretario político de Podemos también ha criticado la intransigencia de las instituciones europeas en la negociación con las autoridades griegas para renegociar los plazos de la deuda y ha asegurado que el pulso demuestra " que no tiene nada que ver com la economía, sino que es una negociación plena y directamente política". Errejón considera que la troika trata de trasladar miedo para que el cambio político no llegue a otros países y ha recordado que la situación del país heleno se debe justamente a la austeridad impuesta por instituciones europeas durante años.