El sector de las renovables, expectante y en la incertidumbre ante las medidas fiscales

Incertidumbre y expectativa son las dos palabras que mejor resumen el sentir de las empresas de energía renovable ante el Proyecto de Ley de Medidas fiscales para la Sostenibilidad energética, aprobado hace un par de meses por el Gobierno. El sector de las renovables ha despuntado en los últimos años en Soria con el desarrollo y la expansión de parques eólicos y la proliferación de plantas fotovoltaicas, especialmente, sin olvidar las plantas de cogeneración que hay en funcionamiento en diferentes empresas.

En este paquete de medidas fiscales hay una en especial que, según fuentes del sector, puede suponer un freno a las renovables y por la que se muestra en contra: la puesta en marcha de una tasa del 6% que se aplicaría a los beneficios obtenidos por cada una de las instalaciones de producción de energía eléctrica. Las consecuencias que puede tener para el propio sector en general y para que continúe desarrollándose en la provincia son, de momento, una incógnita, pero las empresas  no ocultan su preocupación. Por ahora, todas las solicitudes de plantas de energía renovables que se prevén instalar en Soria y que en estos momentos  tramita la Junta siguen adelante.

La jefa del Servicio Territorial de Industria y Energía, Araceli Conde, declinó valorar las consecuencias de esta reforma para el sector de las renovables en Soria, pero dejó claro que «todos los expedientes siguen su curso normal».

El Servicio Territorial tramita en estos momentos 34 parques eólicos para su instalación en la provincia, así como 71 instalaciones fotovoltaicas.  La energía del viento en Soria ha contribuido a hacer de Castilla y León la primera comunidad en potencia instalada. En las instalaciones fotovoltaicas se produce electricidad gracias a la incidencia de los fotones de la luz en el silicio (en unas placas). En ambos casos, la puede autoconsumirse o venderse a la red.

También se están tramitando expedientes para instalar siete plantas de biomasa. En este caso, la energía procede del aprovechamiento de materia orgánica animal y vegetal o de residuos agroindustriales.  La biomasa puede tener un uso térmico (cuando el calor que procede de la combustión se utiliza para algún proceso industrial de la empresa) o un uso eléctrico (cuando además del calor se consigue produce electricidad que luego se vende a compañías eléctricas).

Por lo que se refiere a las plantas de cogeneración, la Junta sólo tramita una en la actualidad.  Según Industria, todas las plantas de este tipo que hay en Soria utilizan gas natural. Finalmente, en el servicio se encuentran en  tramitación dos expedientes para instalar otras tantas plantas termoeléctricas en la provincia.

Energía solar térmica

La Junta no registra las instalaciones de energía solar térmica porque no es necesario solicitarlas en el servicio. «Desde 2006, todos los edificios tienen que llevar placas solares térmicas para el agua caliente. Es algo de obligado cumplimiento», explica la jefa de sección, Edurne Uranga. Así, la «aportación del acs», agua caliente sanitaria, se aprueba a la vez que el proyecto de edificación y no pasa por la Junta.