INUNDACIONES
El monasterio de San Juan de Duero se queda sin visitantes
El río se estabiliza a su paso por la ciudad, pero se mantiene la alerta por precaución
Continúa la alerta en Soria por la crecida del río Duero a su paso por la capital de la provincia. Durante la jornada de ayer se mantuvieron restringidos los accesos al río y además desde la Junta se cerró el monasterio de San Juan de Duero a las visitas debido al nivel del agua. A última hora de ayer los datos de la CHD indicaban que el nivel del río se había estabilizado aunque se mantenía por encima de los 3,5 metros.
La Junta de Castilla y León informó ayer de que se había decidió cerrar las visitas al monasterio de San Juan de Duero de la capital , «debido a la subida del nivel de las aguas del río Duero y la inundación de los accesos». El cierre del célebre momento se venía a sumar a las restricciones impuestas desde el sábado por la mañana por el Ayuntamiento de Soria para acceder a las sendas que discurren junto al río y que comunican a la capital con Garray.
En la jornada de ayer desde el Consistorio se informó que se mantenía la alerta y que las sendas próximas al río iban a permanecer cerradas. Asimismo solicitaron la «máxima prudencia» en los alrededores de los márgenes del Duero. Las imágenes que ofrecía ayer el río eran sencillamente espectaculares y fueron muchos los sorianos que se acercaron para observar el caudal con el que bajaba el Duero a su paso por la ciudad. Durante toda la jornada efectivos de la Policía Local estuvieron patrullando por la zona en prevención de cualquier incidente.
Además de la zona del río, las lluvias provocaron algunos incidentes en la ciudad. Desde el Ayuntamiento informaron que los bomberos tuvieron que actuar por la mañana para retirar algunas ramas de un árbol de La Dehesa en la zona junto al vivero ya que había riesgo de caída de ramas. Asimismo, se efectuó otra salida para apuntalar una chapa en un edificio cercano a la Cámara de Comercio de Soria.
En otro orden de cosas, en el monte Valonsadero se formaron algunas balsas de agua en el camino del vivero y en la zona de la pradera frente a la Casa del Guarda.