SOCIEDAD
Pilar González de Gregorio recurrirá la sentencia que confirma que tiene una hermana
La hija de Leoncio González de Gregorio y la ‘duquesa roja’ apunta que la cuantía de la herencia la debe determinar un juez
Pilar González de Gregorio, hija de Leoncio González de Gregorio y de la conocida como duquesa roja, Luisa Álvarez de Toledo, avanzó ayer a este periódico que recurrirá la sentencia dictada por el Juzgado de Primera Instancia número 77 de Madrid que confirma que Rosario Bermudo Muñoz es hija de aquel y de una sirvienta.
Pilar González de Gregorio confirmó que su representante legal recurrirá la resolución judicial conocida la semana pasada en la que se reconoce que Rosario Bermudo Muñoz fue «fruto de las relaciones extramatrimoniales» entre Leoncio González de Gregorio y la sirvienta de la familia, madre de Rosario.
Pilar, uno de los tres hijos del matrimonio entre Leoncio González de Gregorio y la duquesa de Medina, Luisa Álvarez de Toledo, recordó a la parte demandante de la filiación que la sentencia aún no era firme y mostró su disconformidad con las declaraciones del representante legal de Rosario Bermudo Muñoz, quien estimaba que podría ser beneficiaria de una herencia de unos dos millones de euros.
La hasta ahora única hija de Leoncio González de Gregorio, que tuvo un cuarto hijo extramatrimonial, recordó a Rosario Bermudo Muñoz y a su representante legal que, primero, la sentencia debería ser firme y, posteriormente, deberán presentar una reclamación sobre la herencia a partir de la que «el juez deberá determinar lo que le corresponde».
Pilar González de Gregorio preguntó por qué Rosario Bermudo Muñoz no había presentado la demanda cuando su padre, Leoncio González de Gregorio, vivía y sí lo hizo seis años después de su fallecimiento. Además, recordó que ella y un hermano se ofrecieron para realizar las pruebas para verificar la filiación biológica de Rosario Bermudo Muñoz y así evitar la exhumación del cadáver de su padre enterrado en el panteón familiar ubicado en la localidad soriana de Quintana Redonda.
La extracción de las muestras para la realización de la prueba pericial para determinar la filiación de Rosario Bermudo Muñoz se produjo el 23 de marzo de 2017. «Fue desagradable, quizás a ella –en referencia a Rosario Bermudo Muñoz- le dio igual pero a nosotros no», declaró Pilar, quien es la propietaria del palacio de la familia en Quintana Redonda.
Pilar González de Gregorio arremetió contra Rosario Bermudo Muñoz de quien dijo que «se presenta como una víctima» y matizó que cuando supuestamente ocurrieron los hechos entre su padre y la madre de Rosario, Leoncio era «menor de edad y no existe ni un solo testimonio de su familia».
También cuestionó que el abogado de Rosario Bermudo Muñoz airease el caso en los medios de comunicación. «¿Qué necesidad tiene de ir a la prensa?, yo creo que el abogado lo hace para lograr otros casos», apuntó Pilar González de Gregorio, quien, además, mostró su malestar porque hayan impuesto las costas del proceso judicial a los demandados, entre los que está ella.
El Juzgado de Primera Instancia número 77 de Madrid reconoció en una sentencia hecha pública la semana pasada que Rosario Bermudo es efectivamente hija de Leoncio González de Gregorio, el marido de la XXI duquesa de Medina Sidonia, Luisa Álvarez de Toledo.
La demanda recogida el 15 de enero de 2014 manifiesta «que el nacimiento de Rosario Bermudo Muñoz fue fruto de las relaciones íntimas extramatrimoniales» entre su madre y el marido de la conocida como duquesa roja cuando la primera «entró a trabajar como sirvienta» en una vivienda de la familia, trasladándose incluso a Badajoz con ellos durante el verano.
Siempre según la demanda recogida en la sentencia una vez conocido el embarazo «por los propietarios de la casa en la que trabajaba, los mismos prescindieron inmediatamente de sus servicios por tratarse de relación extramatrimonial entre personas de diferente estatus económico–social». No obstante Leoncio González de Gregorio la reconoció «como hija suya en testamento abierto otorgado».
La demanda también señala que Rosario Bermudo Muñoz «ha contado con escaso número de pruebas que pueda presentar como indicio de la filiación extramatrimonial, especialmente por el mutismo con que su madre ha mantenido siempre su relación con Leoncio, por lo que contrató los servicios profesionales de un detective» para recabar datos que sostuviesen su pretensión.
Y en la sentencia se indica que una de ellas se logró «tras llevar a cabo las investigaciones pertinentes y el seguimiento oportuno», cuando «se hizo con una botella de agua que tras ser bebida» por uno de los hijos reconocidos «fue arrojada por el mismo a una papelera» en su lugar de trabajo. Del recipiente se extrajo el ADN, concluyendo que la probabilidad de que hubiese una media hermandad ascendía a un 99,58528%. No obstante, la prueba al cuerpo del duque consorte, tomando muestras de «mucosa oral» y de «pieza dental proveniente del cadáver exhumado», arrojó un resultado claro.
«El informe es definitivo respecto de la paternidad de Leoncio respecto de doña Rosario Bermudo Muñoz» tras emplear «técnicas de amplificación genética». En cifras, la «probabilidad de paternidad es del 99,999999999994%», o de una entre 15 billones de que no sea así. De esta forma, «el Registro Civil Único de Madrid debe proceder «a la rectificación del primer apellido de la inscrita como Rosario Bermudo Muñoz, que pasará a apellidarse González de Gregorio».