Industria
El proyecto de Elyse en el PEMA creará 260 empleos directos durante su construcción y 650 indirectos
La multinacional francesa necesitará el equivalente al riego de 160 hectáreas aunque el director de EM-Numancia dice que el agua requerida será "lo más natural posible" y que se captará del río

Robador, De Gregorio y Torres-Quevedo.
El proyecto de la multinacional francesa Elyse avanza en el Parque Empresarial del Medio Ambiente (PEMA). El director del programa eMetanol Numancia de Elyse Energy Ibérica S.L, Leonardo Torres-Quevedo, ha participado este jueves en una jornada del hidrógeno en la capital soriana, junto a la delegada territorial, Yolanda de Gregorio, y el gerente de la Asociación Castellano y Leonesa del Hidrógeno (H2CYL), Javier Robador.
Torres-Quevedo ha señalado sobre la planta de hidrógeno que la multinacional implantará en el PEMA que es un proyecto de producción de metanol de 50.000 toneladas "que hacemos en Garray, en el PEMA, que produce metanol a partir de CO2 capturado e hidrógeno renovable".
Elyse se dedica a la producción de moléculas bajas en carbono en diferentes proyectos, tanto en Francia como en España o Portugal. Torres-Quevedo ha señalado que Elyse cuenta "no solo con los socios fundadores sino también con el soporte de los principales grupos inversores de energía renovable de Europa, y esto nos da el soporte y el pulmón necesarios para desarrollar los proyectos hasta buen puerto".
El proyecto del PEMA utilizará parcelas que "están ubicadas en el polígono y dará empleo en la fase de operación al menos a 50 personas de forma directa y de forma indirecta a 125".
"Las estimaciones de construcción hablan de 260 puestos de trabajo y unos 650 de forma indirecta", con una inversión de más de 200 millones de euros. La previsión es que esta plana esté operativa en el año 2030.
Sobre la necesidad de agua de la planta, el director del proyecto ha señalado que hay dos consumos de agua principales; uno el de la propia electrolisis, "que es muy bajo", y otro "el agua de refrigeración del proceso, como es habitual en la industria, que puede tener mayor o menor consumo". En el caso del PEMA, el consumo máximo, según Torres-Quevedo, "equivale a unas 160 hectáreas de regadío, teniendo en cuenta que en Soria hay 10.800 hectáreas de regadío, por lo que es un consumo bastante limitado. Es un consumo bruto de agua del río, no consumimos el agua de las poblaciones, sino que nos interesa el agua lo más natural posible, y parte de ese agua se devuelve al cauce después de haberla utilizado".
El pasado mes de mayo, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ya concedió a esta planta la declaración de impacto ambiental.
El proyecto de Elyse, junto a la planta de hidrógeno de Redexis, son las dos iniciativas que vinculan a Soria con el proyecto del Valle del Hidrógeno de Castilla y León y está enfocado a situar el PEMA como punta de lanza de la producción de nuevas energías renovables.
Por su parte, la delegada territorial, Yolanda de Gregorio, ha reclamado al Gobierno y a Red Eléctrica que se potencie la subestación eléctrica de Almazán y que la línea de Tierras Altas hasta la villa adnamantina se acerque lo máximo posible a la capital para dar servicio al Parque Empresarial del Medio Ambiente.