Un tornado arranca de cuajo una nave agrícola en Fuentelmonge

«Fue algo fuera de serie, algo que solo antes habíamos visto en la televisión», explicó el teniente alcalde de Fuentelmonge, José Luis Alejandre, testigo presencial del pequeño tornado que pasó por su pueblo durante la medianoche del sábado.

Alejandre se encontraba de paseo con su esposa en lo era una tranquila y calurosa noche veraniega. En unos segundos comenzó a soplar un fuerte aire y vio cómo se levantaba por el aire los tejados de uralita de las naves de los agricultores del pueblo que chocaron con el tendido eléctrico ocasionando chispazos y descargas eléctricas.

El huracán apenas duró unos minutos. Cuando todo estuvo en calma, Alejandre se acercó hasta Las Eras, donde se encuentra las naves agrícolas, a unos 100 metros del casco urbano del pueblo, y se comprobaron los destrozos. Entonces se apreció como el tornado se había cebado con una nave, en la que levantó de cuajo el tejado junto con los pilares y la fuerza del viento lo desplazó unos 80 metros, pero ocasionó daños en el resto de las naves de Las Eras, unas 20, y en el arbolado.

Intervino la Guardia Civil y los bomberos porque los restos del tejado de la nave se quedaron pegados al tendido eléctrico. Se acordonó la zona para evitar daños personales y técnicos de la empresa distribuidora de electricidad, Cobra, se encargaron de retirar las chapas.

A lo largo de la jornada de ayer se apreció con mayor detenimiento los daños. «Todas las naves tienen daños en los tejados o en los aleros», puntualizó Alejandre, quien explicó que también se ha comprado que el fuerte viento movió las tejas en varias viviendas, en la ermita del pueblo «y seguro que tendremos conocimientos de más cosas a lo largo de estos días». Los afectados todavía no han valorado los daños económicos porque «nos ha pillado en unas semanas malas por la enorme tarea que tenemos con la cosecha», dijo Alejandre.

Fuentes de la Agencia Estatal de Meteorología confirmaron ayer que el sur de la provincia estuvo afectado, a la hora del tornado, por la entrada de una masa en forma de tormenta.