Fin de fiestas en la plaza

En pocas ocasiones sabe mejor la carne con patatas como cuando se disfruta en caldereta y al aire libre. El único pero, por ponerle alguno, era que el suculento menú degustado ayer en La Arboleda, en Almazán, tenía cierto regusto a fin de fiestas. La villa despidió ayer las fiestas de la Bajada de Jesús por todo lo alto y, según es su costumbre, con las dos actividades propias de la última jornada: la caldereta en el parque y el Grand Prix en la plaza de toros. En torno a 300 personas, según fuentes municipales, se dieron cita en la caldereta preparada este año por Paellas con Tino. Muchos comensales optaron por un mantel de hierba y hubo otros que prefirieron llevar de casa mesas y sillas. La caldereta congrega a jóvenes y peñistas pero también a cuadrillas y familias. Muchos de los participantes fueron después a la plaza de toros para disfrutar del Grand Prix en el que participaron tres equipos.

No faltaron las caídas, ni los revolcones, y mucho menos las risas del público con las vaquillas. Hubo tres equipos conformados por miembros de las peñas de Almazán, donde hay más de 50 colectivos de este tipo, según indicaron fuentes municipales.