DIPUTACIÓN
El Plan Provincial incluye 259 obras con una inversión de 7,7millones
De Miguel asegura que se ha realizado un «reparto justo» y se ha intentado atender las peticiones de todos los pueblos
Esther Pérez y José Antonio de Miguel en la presentación de los Planes-M.T.
La comisión de Planes Provinciales, Obras Públicas y Ordenación del Territorio de la Diputación dictaminó ayer favorablemente el Plan Provincial 2018 con una inversión total de 7.710.498,12 euros, con los votos favorables del PSOE y los diputados no adscritos y la abstención del PP.
Un plan que incluye un total de 259 obras de las que se beneficiarán 180 localidades. La Diputación subvencionará estos proyecto con una partida de cinco millones de euros y el resto lo cofinanciarán los municipios. El presidente de la Comisión de Planes, José Antonio de Miguel, recordó que la aportación de la Diputación es fija desde el inicio de la legislatura y que forma parte de uno de los acuerdos del pacto de investidura.
Junto con el Plan Provincial, la comisión dictaminó también el Plan de Sequía, que incluye cinco actuaciones y una inversión de 200.000 euros, así como a las obras plurianuales que complementan el Plan y que ascienden a 400.000 euros para 13 municipios. Al final, si se suman las actuaciones de los tres planes (Provincial, Sequía y Plurianual), se podrá licitar obra por un montante de 8,3 millones de euros, «que vendrá bien a la provincia», manifestó la vicepresidenta, Esther Pérez. Todas estas actuaciones tendrán que ser aprobadas en el próximo Pleno de que se celebrará el jueves 1 de febrero.
Los diputados de Planes han celebrado cuatro comisiones para seleccionar los proyectos que contarán con partida económica entre las 404 peticiones que se presentaron para recibir subvención. Únicamente siete municipios rehusaron concurrir a esta convocatoria (a los que hay que sumar seis que contaban ya con obras plurianuales) y que son: Cabrejas del Campo, Estepa de San Juan, La Losilla, Portillo de Soria, Rebollar, Suellacabras y Villar del Ala.
En esta convocatoria se ha decidido extraer todas las actuaciones solicitadas por los ayuntamientos en materia de alumbrado público para canalizarlas dentro de la convocatoria de ayudas del IDAE, a la que opta la Diputación para toda la provincia. Las peticiones de los ayuntamientos requieren de inversiones que ascienden a 900.000 euros. «Si al final la convocatoria del IDAE no sale adelante nos hemos comprometido a facilitar partidas económicas de remanentes para ponerlas a disposición de los ayuntamientos», manifestó De Miguel.
El presidente de Planes se reafirmó en que se ha realizado «un reparto justo» de la subvención entre las necesidades que han trasladado los ayuntamientos. Rechazó las críticas de los alcaldes de pueblos pequeños, en los que «la inversión por habitante es más elevada que en los pueblos más grandes», puntualizó, a la vez que confesó que «hemos intentado atender las necesidades de toda la provincia sin descuidar ningún pueblo». El que más subvención recibe este año es el Burgo de Osma, seguido de Almazán, con apenas diferencia.
De Miguel indicó que este reparto se ha realizado de acuerdo a las bases, en las que existen algunos requisitos mínimos como los 5.000 euros por municipio más los 3.000 euros por núcleo de población. De Miguel recordó que una de las novedades introducidas en las bases durante esta legislatura fue asignar 3.000 euros para cada barrio «para intentar corregir lo que sucedía antes en muchos núcleos de población a los que no les llegaba nada».
Por su parte, la vicepresidenta y portavoz del equipo de Gobierno, Esther Pérez, subrayó que se trata de un Plan «importante» y explicó que las bases que se cambiaron con la llegada del PSOE al Gobierno de la Diputación propiciando un reparto «más equitativo, solidario y justo» de los fondos.
En este sentido agregó que «los objetivos que nos marcamos como equipo de Gobierno, y que ya defendíamos estando en oposición, pasaban por unas bases más justas, equitativas y solidarias y por eso desde el primer año que llegamos a Diputación se aprobaron unas nuevas bases teniendo en cuenta que por los criterios que se estaban manteniendo hasta la fecha había barrios a los que se estaba penalizando durante muchos años». Por último, Pérez recordó que los ayuntamientos «son cada vez más responsables en sus peticiones y saben a las obras que pueden optar», dado que en convocatorias anteriores la Diputación se ha encontrado con un importante número de peticiones y en la mayoría de los casos incluían elevadas cuantías.