Cultura
Ocenilla incorpora una nueva escultura en su museo al aire libre
Se trata del nombre de la localidad realizado en en hormigón armado y recubierto de piedra arenisca que ha sido realizada por un vecino del pueblo
Ocenilla luce desde hace un par de semanas una nueva escultura. Es el nombre de la localidad «basado en la caligrafía de los cuadernos Rubio con la que nos hacían aprender en las escuelas», tal y como explica su autor, un vecino del pueblo llamado Juan Barnuevo.
Es una escultura con unas dimensiones de 6 metros de largo por 2,10 metros de alto. «Está realizado en hormigón armado, recubierto de piedra arenisca y ladrillo rústico», apunta Barnuevo que destaca que para colocarla en una finca de propiedad municipal fueron necesarias un par de máquinas.
El autor ya cuenta con varias obras repartidas por el pueblo a modo de museo al aire libre como una lavandera o un pastor con sus ovejas. Todas ellas, explica, «buscan realizar un guiño al medio rural representando figuras importantes en los pueblos». La última ha querido mostrar «la importancia de los maestros y las escuelas rurales».
Barnuevo explica que realiza las obras «de forma totalmente altruista» ya que su profesión es albañil. Sin embargo, la escultura y trabajar con materiales como el hierro o la madera es una afición. Trabajar con las manos en una pasión: «Antes también he realizado muchos escudos de piedra en mis ratos libres».
Entre las esculturas, hay colocada en el pueblo una abubilla ya que, explica, «en Ocenilla nos llaman los abubillos». Por eso es un ave que no ha olvidado poner sobre las letras del nombre del pueblo que ya dan la bienvenida a vecinos y visitantes. Una obra que ha tardado en crear «unos dos meses en ratos perdidos». Volviendo a dejar claro que todo lo que hace «tiene un sentido».