Paraíso escénico en Ciudad Rodrigo

Fueron unas vacaciones veraniegas del rector del Seminario Diocesano de Ciudad Rodrigo, Juan Carlos Sánchez, en la localidad leridana de Tárrega, las que encendieron la mecha. Al ver la feria de teatro del municipio catalán, pensó por qué no organizar en Ciudad Rodrigo una iniciativa similar: “Nosotros tenemos una ciudad mucho más bonita, y quizá podríamos propiciar algo así”.

 

Con esa idea en mente, y tras publicar un par de artículos en prensa lanzando al aire la posibilidad, Sánchez llevó la propuesta al equipo de animación teatral liderado por Rosa María García Cano en la capital salmantina. Poco tiempo después, el 23 de junio de 1997, se constituía oficialmente la Asociación Cultural Cívitas Animación Teatral, con el objetivo de la “promoción social, cultural y educativa desde los parámetros y metodología propios de la animación sociocultural, el desarrollo comunitario y la educación en el tiempo libre”.

Su primer gran reto era poner en marcha los cimientos de la Feria de Teatro de Ciudad Rodrigo, una iniciativa pionera en el noroeste peninsular, que echó a andar el verano siguiente, cuando se celebró la primera edición entre el 27 y el 30 de agosto de 1998. El espectáculo encargado de levantar el telón fue ‘Volpone’, de la compañía Suripanta Teatro, y durante los cuatro días siguientes pasaron por Miróbriga 17 compañías españolas y portuguesas que realizaron otras tantas funciones en seis espacios, ante la presencia de más de 10.000 espectadores (entre ellos 1.100 niños que participaron en novedosos talleres de pedagogía teatral) y 34 programadores españoles, portugueses y franceses, dispuestos a encontrar en Ciudad Rodrigo teatro de calidad para incluir en las programaciones de sus centros.

En total, 42 personas trabajaron con denuedo para que aquella primera edición marchara como la seda, sentando las bases de un proyecto hoy consolidado y un equipo que, durante los días del certamen, se expande hasta los 120 profesionales. La suerte de la Feria cambió en su cuarta edición, cuando la Junta de Castilla y León decidió asumir como suyo el proyecto, asumiendo la mayor parte del presupuesto (en la actual edición, asciende a 335.310 euros, de los cuales el Gobierno regional aporta 262.310, casi el 80 por ciento). “La Junta nos hizo una OPA amiga”, recuerda con una sonrisa Rosa María García Cano, que ha dirigido la Feria desde su primera edición hasta la actualidad.

Una de las principales dificultades que ella y su equipo encontraron desde el primer momento fue tener que explicar a los gestores institucionales las diferencias entre feria y festival. “Teníamos claro que festivales había muchos, y para distinguirnos en este extremo sur occidental de la comunidad y que realmente se pusieran los ojos en nosotros teníamos que tener algo que nos definiera. El modelo de feria nos pareció muy apropiado: un producto, unos compradores de ese producto, y un entorno ferial, que en este caso es toda una ciudad, puesta al servicio de esa venta. Nos pareció muy apropiado el invento y lo desarrollamos con todas sus vertientes”, detalla.

Celebrar el teatro

Este martes, Ciudad Rodrigo acogerá la decimocuarta edición de la Feria, que en esta ocasión se prolongará durante cinco días, hasta el sábado, con la participación de 31 compañías de cinco países (España. Portugal, Italia, Francia y Bélgica), que han sido elegidas entre 643 propuestas recibidas y que representarán 42 funciones, y la previsión de que alrededor de 180 programadores visiten el municipio salmantino para participar en la convocatoria.

La compañía encargada de levantar el telón será Teatro Corsario Castilla y León, con el espectáculo ‘El gran viaje’, un cariñoso homenaje al fundador de la agrupación, Fernando Urdiales, fallecido el pasado 12 de diciembre tras una larga enfermedad. El Teatro Nuevo Fernando Arrabal vestirá sus mejores galas el martes, a las 18.30 horas, para acoger la función y levantar el telón a cinco días de celebración del teatro básicos para dinamizar las agendas de bolos de las compañías de la región.

Hasta 14 de los espectáculos programados estarán destinados al público infantil y familiar, y la danza será otra de las protagonistas de la cita, con seis espectáculos que recogen prácticamente todas las modalidades posibles: danza urbana, contemporánea, infantil, flamenco, aérea y de calle. Tampoco faltarán montajes de teatro contemporáneo, clásico, musical, gestual, de calle, títeres o malabares.

La Feria de Teatro de Castilla y León es un escaparate de especial importancia para las compañías de Castilla y León, pero también para las de Extremadura, Portugal y otras comunidades del Occidente peninsular. Este año serán diez las compañías de la región que participen. Junto a Corsario, participarán en la convocatoria son Teloncillo (con ‘Besos’ y ‘Los animales de Don Baltasar’), Bambalúa Teatro (con ‘¡P-I-R-A-T-A-S! Alerta-basura salvemos el mar’, Pie Izquierdo (con ‘El gran mercado del mundo’), Rayuela (‘Dogville’), Spasmo Teatro (‘Ebook. Las edades del libro’), Teatro La Sonrisa (‘Smile’), Teatro Azar (‘El juicio de Dayton’), Quequé (‘Antolojeta. Obras con petas’) y Producciones Santos Lora (‘Arte emergente: Amós Lora’).

A ellas que se sumarán cuatro formaciones portuguesas, dos extremeñas, dos gallegas y cuatro andaluzas, junto a una de autonomías como Cataluña, Madrid y Valencia, y el resto de Francia, Italia y Bélgica. Todos darán forma a una fiesta del teatro que ya se conoce como ‘la feria de occidente’ y que, un año más, convertirá Ciudad Rodrigo en referencia peninsular del teatro.