Heraldo-Diario de Soria

EDUCACIÓN

La Universidad de Valladolid pierde 6.747 alumnos en los últimos diez años

La UVA registra el segundo mayor descenso de la Comunidad con un 23%, solo superada por León / El campus de Soria es el único con un saldo positivo y sus alumnos suben un 14,8%

Publicado por
ALBA CAMAZÓN / VALLADOLID
Soria

Creado:

Actualizado:

Cada vez menos alumnos optan por estudiar un grado en la Universidad de Valladolid (UVA). La institución universitaria ha perdido 6.747 estudiantes de grado en los últimos diez años, con una tasa de matriculaciones que se ha reducido un 23,13% desde el curso 2007–2008. Esto quiere decir que los 19.069 universitarios que se han matriculado este curso en estudios de grado están muy por debajo de los 25.816 que estudiaron en la universidad hace diez años. L institución ha perdido estudiantes en todos sus campus, salvo en Soria, donde, pese a la caída de matriculados en los últimos cuatro cursos, se ha registrado un aumento del 14,8% y hay 208 alumnos más que en el curso 2007–2008.

El de Palencia es el campus de la UVA más afectado por esta caída, con un 30,24% matriculaciones menos (719 alumnos) que antes de la crisis económica, seguido del campus de Valladolid, que pierde 5.614 alumnos (–29,23%) y Segovia, cuyo número de estudiantes de grado se ha reducido un 21,55% desde el curso 2017–2018.

La Universidad de León (ULE) y la de Valladolid (UVA) son las que más proporción de estudiantes han perdido en este periodo. Las matriculaciones en grado han descendido un 28% en la ULE. Es decir, este curso se han matriculado 9.103 personas, casi cuatro mil menos que hace diez años, cuando se matricularon 12.735 estudiantes en una licenciatura o diplomatura. La UVA, por su parte, tiene un 23,13% menos estudiantes que antes. Las universidades de Burgos (UBU) y Salamanca (USAL) también registran bajadas, aunque no tan pronunciadas, del 18,48% y 17,39%, respectivamente.

Por otra parte, el campus universitario más afectado por este fenómeno de toda Castilla y León pertenece a la USAL y se ubica en Zamora, que prácticamente ha perdido la mitad de sus alumnos en los últimos diez años y ha registrado un mínimo histórico para el campus, con 1.362 estudiantes.

También la USAL ha perdido alumnos en Béjar (39,63%) y Salamanca (14,02%), que a su vez registran un mínimo histórico. El campus de Ávila se caracteriza por ser la excepción de la USAL, con un incremento del 4,88% respecto al curso 2017–2018 y del 1,6% respecto al año pasado, cuando sí registró una menor tasa de alumnos. El número de estudiantes en el campus de Ávila, como en tantos otros, aumentó entre 2007 y 2012, cuando la cifra comenzó a reducirse. En el caso particular de Ávila, esta llegó a tener 1.973 alumnos, muy por debajo de los 1.139 que se han matriculado este curso.

El otro campus que ‘se libra’ de estos mínimos históricos es el de Ponferrada, perteneciente a la Universidad de León, con 75 universitarios más que el curso pasado, en el que, como Ávila, registró su menor tasa de matriculación. Sin embargo, Ponferrada ha matriculado un 35,7% menos alumnos este curso que en 2007–2008. La cifra del principal campus leonés tampoco es positiva, porque ha bajado un 28,01%, con una pérdida de más de tres mil universitarios.

CAUSAS DE ESTA BAJADA

Esta caída en el número de matriculaciones se debe, principalmente, a la población joven residente en los alrededores de los campus y a la consolidación del Plan Bolonia que pretendía unificar los sistemas universitarios europeos para facilitar «la empleabilidad, la movilidad y el reconocimiento de los títulos universitarios en toda Europa», como explicó entonces el Ministerio de Educación. El plan antiguo ramificaba los estudios universitarios en dos: la licenciatura (de cinco años) y la diplomatura (de tres). Tras la implantación del Plan Bolonia, los grados establecieron un plan de estudios de cuatro años –salvo en contadas excepciones como Medicina o Arquitectura–.

El Plan Bolonia se comenzó a implantar en el curso 2010–2011, por lo que a partir de entonces las licenciaturas y las diplomaturas dejaron de matricular alumnos en beneficio de los grados. En el curso 2013-2014 los estudios de grado se llenaron por primera vez en toda la universidad, de primero a cuarto de carrera.

A pesar de la menor duración del plan de estudios, las matriculaciones también muestran un declive desde que se terminó de consolidar Bolonia. La tasa de matriculación de estudiantes de grado en la UVA ha bajado un 3,5% este año académico respecto a 2013–2014, según los datos publicados por la Consejería de Educación.

También es importante destacar que esta caída se produce pese a la inversión económica que la universidad ha realizado en los últimos años en ampliar su oferta académica con once grados nuevos desde que se implantó el Plan Bolonia. Este curso, la UVA ofertó 81 grados en total, cuatro más en el campus de Valladolid, tres en Segovia, dos en Palencia y otros dos en Soria, lo que suma un total de 48 grados en Valladolid y 11 en cada uno de los demás campus.

MAYORÍA EN SOCIALES

Los estudiantes que deciden formarse en la Universidad de Valladolid están más interesados en las Ciencias Sociales y jurídicas, puesto que 9.429 alumnos eligieron este curso centrarse en esta área. Le siguen por detrás las ingenierías y Arquitectura (4.191), las Ciencias de la Salud (2.831), Arte y Humanidades (1.532) y Ciencias, que acoge 1.086 estudiantes.

Sin embargo, parece que cada vez hay menos alumnos de la UVA con intención de estudiar una carrera de Ingeniería y Arquitectura, cuyo número de matriculaciones baja un 38,22% con respecto a hace seis años y de Arte y Humanidades, cuya tasa disminuye un 28,24%. También ha bajado esta cifra en las Ciencias Sociales y Jurídicas (18,19%).

Las áreas que sí atraen a un mayor número de alumnos de la UVA son las Ciencias y las Ciencias de la Salud, cuya tasa de matriculaciones se ha incrementado un 19,34% y un 15,65% respectivamente.

En el resto de Castilla y León se plantea una situación similar. El 33,8% de los estudiantes opta por estudiar una carrera de Ciencias Sociales –que no incluye los grados de Educación– según los datos de este año. Es decir, 17.290 jóvenes tienen claro que su futuro está entre números y personas, y por eso deciden estudiar carreras como Economía, o Recursos Humanos.

Las siguientes áreas que más interesan a los universitarios son las Ingenierías y Arquitectura, elegidas por el 18,31% de los estudiantes como área profesional, y las Ciencias de la Salud. Es decir, en Castilla y León hay casi diez mil alumnos que están estudiando carreras como Medicina, Enfermería, Fisioterapia o Logopedia. Esta cifra supone el 17,5% de los universitarios. El 14,31% de los universitarios elige la Educación como salida laboral. La mayoría de ellos, mujeres. En último lugar están las Artes y Humanidades (10,9%) y Ciencias (8,2%), con 6.107 y 4.626 estudiantes, respectivamente.

Por otra parte, casi un tercio de los grados impartidos en la UVA tiene menos de cien alumnos en el cómputo de todos los cursos. Estas 21 carreras van desde los Estudios Clásicos hasta el doble grado en Matemáticas y Física. Sin embargo, los motivos y límite de plazas son diferentes. Por una parte están las carreras que llenan aproximadamente la mitad de las plazas ofertadas, como Estudios Clásicos, Estadística (campus de Valladolid) o Relaciones Laborales (campus de Segovia y Soria). Por otra parte, varios estudios de grado ofrecen pocas plazas, como El doble grado de Matemáticas e Ingeniería Informática de Servicios y Aplicaciones que se imparte en el campus de Segovia, cuyo límite de plazas es de cinco por curso.

En el campus de Valladolid, hay diez carreras con menos de 60 alumnos. Cuatro de ellas tienen una oferta tan limitada (de entre 5 y 15 plazas por curso) que tienen una nota de corte superior al 10 y una de ellas, el doble grado de Matemáticas y Física fue la carrera con mayor nota de corte (13,171), por encima incluso de Medicina. Otros estudios universitarios, sin embargo, no han completado la oferta académica de este curso, como Geografía en Valladolid, que ofertaba 25 plazas y solo 14 se han matriculado en primero, o Relaciones Laborales y Recursos Humanos en Segovia, que en el primer curso tiene 12 estudiantes de los 35 que ofrece. 

MÁS ALUMNOS EN MÁSTER

Las tasas de los másteres, más elevadas que las del grado, no ha impedido que cada vez haya más estudiantes que decidan especializarse durante otro año más en la universidad. En particular, las entidades públicas de la comunidad han inscrito un 20% más de alumnos de máster este curso que hace cinco años.

La UVA alcanza los 1.212 estudiantes de máster y registra la segunda menor tasa de crecimiento, de un 22,3%. La UBU ha duplicado esta cifra y hoy tiene casi 500 alumnos de máster, con un incremento superior al de la ULE (84%), que casi alcanza el millar de alumnos. La universidad con menor crecimiento es la USAL que, pese a ser la favorita para este tipo de formación, con 1.656 universitarios en máster crece un 16,9% respecto a hace cinco años.

tracking