El Almazán firma tres puntos y se toma un respiro

El Almazán fue mejor, realizó un gran partido de fútbol y estuvo acertado de cara a portería. Eso tiene como consecuencia la victoria. El conjunto dirigido por Luis de Miguel plasmó en el resultado el partidazo realizado ante el Bembibre. Era lo que le faltaba al equipo de la Villa y en los últimos encuentros lo está consiguiendo. Suma siete puntos de nueve posibles. 

Y es que esta vez sí salió todo a pedir de boca en La Arboleda. Zazu, uno de los protagonistas del partido, abrió el marcador a la media hora, tras un gran disparo desde la frontal del área y Mouco, tres minutos antes del descanso, hacía el segundo al aprovechar un gran centro de Martín tras una jugada individual del arcobrigense. Primera parte casi perfecta y 2-0 en el marcador. Pero nada más comenzar el segundo acto de nuevo Zazu, que no quería sorpresas negativas en el choque, conseguiría el tercero tras un tiro cruzado desde la parte izquierda. Los leoneses recortarían distancias en el marcador tras un despiste en un saque de esquina. Pero el Almazán no pasó apuros. Incluso Martín desaprovechó un penalti que pudo ser el cuarto adnamantino. En definitiva, partidazo local y victoria. 

El Numancia Juvenil vio como, en tres minutos, se le iba al traste el buen trabajo realizado durante el cómputo general del partido, para dejarse por el camino dos puntos que si el fútbol hubiera sido justo con los sorianos se hubiesen quedado en la Ciudad del Fútbol. Pero cuando no aprovechas las ocasiones es lo que suele suceder, y así les pasó a los pupilos de José Alejandro Huerta en la mediodía de ayer. Un partido que parecía controlado, gracias a los tantos de David Sanz a los cinco minutos, tras una acción individual, y de Revidiego al filo del descanso, después de ejecutar a la perfección un mano a mano ante Jonathan se desmontó en el segundo acto. Fue a doce minutos para la conclusión cuando se torció el encuentro. 

Después de que Jonathan evitase el tercero de Revidiego al ganarle en el mano a mano, el consiguiente saque de esquina se transformó en una contra que finaliza Eguen. Con los nervios a flor de piel el equipo rojillo cometería un penalti innecesario tres minutos después. Lo transformó Ibon para poner las tablas en el marcador. Algo ilógico e injusto para los méritos de los dos equipos. Con las tablas en el marcador el Numancia buscó a la desesperada el tercero, pero ya era tarde y se quedó con la miel en los labios tras un buen partido local.