El Numancia salva un punto ante el Mallorca a base de casta

La casta, el orgullo y el coraje, además del empuje de la afición, salvaron ayer los muebles para un C.D. Numancia con doble cara en el vital encuentro por la salvación ante el Mallorca. Después de unos primeros 45 minutos apáticos y en los que el conjunto balear se marchó a vestuarios con ventaja gracias al gol de Alfaro, los rojillos apelaron a todo lo que llevaban dentro para al  menos sacar un punto que deja a los sorianos a tres puntos de los puestos de descenso. Regalón, como no a saque de esquina, neutralizaba la renta visitante y al final el Numancia pudo ganar, aunque también pudo perder con dos contras mallorquinistas que pudieron dictar sentencia.

El Numancia y el Mallorca se la jugaban en un enfrentamiento  con tintes de final para uno y otro bando. La responsabilidad y lo que estaba en juego atenazaron a unos y a otros y la primera parte fue un sin sentido en una y otra dirección. El equipo de Anquela estaba aletargado, aunque en el minuto 13 Natalio tuvo el 1-0 pero su disparo lejano se estrellaba en el larguero. El Mallorca era una caricatura en defensa y de esta debilidad los rojillos eran incapaces de sacar provecho. El Numancia jugaba con el freno de mano y las ideas brillaban por su ausencia.

Los insulares apenas llegaban a las proximidades del área de Biel Ribas, pero en una de sus escasas apariciones sacaban petróleo. Hemed cobraba protagonismo en la línea de fondo ante Gaffoor y su centro lo cabeceaba a la red Alfaro de un impecable cabezazo. Era el minuto 20 y fue un jarro de agua fría con mayúsculas ya que los nervios iniciales se incrementaron en el equipo y en la parroquia local. El Numancia se intentó recomponer, aunque el gol le dejó demasiado tocado hasta el tiempo de descanso. A pesar de todo, los rojillos sacaban fuerzas de flaqueza y Enrich en dos ocasiones estuvo muy cerca de conseguir la igualada. El Mallorca dejaba claras sus intenciones de salir a la contra para poner la puntilla.

Tras la decepcionante primera mitad, al Numancia no le valía otra que salir a por todas en la reanudación. Toque de corneta con la afición soriana como principal respaldo en búsqueda de un empate que se iba a resistir hasta límites insospechados.

Sufrimiento y suspense en los primeros compases de la segunda mitad con dos acciones ofensivas del Mallorca que bien pudieron sentenciar y hundir al Numancia. Primero Nsue y después Alex Moreno tuvieron en sus botas el 0-2, aunque por fortuna para los sorianos fallaron en los últimos metros. El Mallorca había perdonado y a partir de ahí el Numancia empezó a creer en sí mismo. A base de casta y orgullo metieron a su rival en el área y una y otra vez pusieron cerco al portal de Miño.

Pero en esta temporada el Numancia no está teniendo nada de fortuna y remates que otros años eran gol este año se resisten. Como muestra, el remate de Juanma a la salida de un córner que se estrellaba en el larguero y el balón caía en la misma línea de gol. Los de Anquela, que para entonces ya había realizado dos cambios acertados con la entrada al campo de Palanca y David González, lo seguían intentando. Palanca, en otras tardes muy criticado, iba a ser el revulsivo y como mediapunta ponía en jaque a la titubeante defensa balear. Suyas iban a ser las mejores acciones ofensivas, pero el empate, no podía ser de otra forma, tuvo que llegar a balón parado. Saque de esquina que ejecuta Julio Álvarez y Regalón, superado a todos sus marcadores, anotaba la igualada. Alivio para un Numancia al que el punto le sabía a gloria.

Pero los rojillos querían más y Sergi Enrich tuvo en su cabeza el 2-1 tras un centro de Palanca. En los últimos minutos, el Numancia pudo ganar pero también pudo perder en una acción de Geijo que supo taponar la zaga soriana. Ya en el tiempo de descuento de nuevo Enrich tuvo la victoria pero otra vez el balón se marchó lamiendo el poste de Miño. No hubo tiempo para más en un encuentro con más emoción que fútbol y que deja en la tabla a los dos equipos igual que estaban.