FÚTBOL
El Río Duero sale victorioso
En un enfrentamiento con dominio alterno de los dos contendientes, el conjunto soriano se impone en el quinto y definitivo parcial
Subido a una montaña rusa de juego, efectividad y desacierto, el Río Duero pasó de manifiesto dominador en el inicio de su enfrentamiento con el Unicaja Almería a dominado con escasas dosis reactivas en los dos siguientes parciales para recuperar el pulso competitivo y forzar el desempate en el cuarto y sumar una victoria de mucho mérito y prestigio frente a un rival de enorme potencial. Uno de los equipos llamados a jugarse los títulos de la temporada. Un resultado que le permite acumular dos puntos más en su evidente huida de la zona de peligro y su asentamiento entre los ocho mejores clasificados.
El duelo comenzó igualado en los primeros puntos del parcial inicial. Siendo el Río Duero un equipo coral sin un jugador referente que asuma la responsabilidad ofensiva para anotar, necesita de la aportación de la mayoría de sus efectivos para mantener su mejor versión competitiva. Con el constante goteo de los puntos por parte de Salvador, Villalba, Osorio, Igor Silva, Mario Junior se rompió el primer set a favor de los celestes que administraron la ventaja adquirida a base de un juego sólido en el remate y fuerte en el bloqueo, con buenas recepciones para armar el ataque y una defensa con pocas fisuras para minimizar las acciones ofensivas de los jugadores de Unicaja. El parcial cayó por su peso y por el buen despliegue local. Todo era felicidad en un gran comienzo de choque.
El segundo comenzó como terminó su precedente hasta que Unicaja reaccionó. Ni el tiempo solicitado por Elías Terés, ayer también sustituto de Manuel Sevillano en la dirección, remedió lo que se avecinó. Tampoco los cambios con la entrada de Pires por Villalba. El conjunto andaluz puso en marcha el bloqueo y afianzó una renta suficiente para igualar el marcador.
El tercer set calcó al segundo aunque en esta ocasión el Unicaja no necesitó ninguna reacción. Le sirvió con dar continuidad a las acciones desarrolladas durante el anterior parcial. Desde el comienzo puso puntos de distancia y borró al grupo de Elías Terés desplegando su mejor juego de toda la matinal. Al Río Duero le quedó aguantar el chaparrón hasta caer por nueve puntos de diferencia. Había pasado de situarse en lo más alto de la montaña rusa a verse en lo más bajo. De lo mejor a lo peor como en alguna cita anterior en la que desde la desventaja remontar se presentaba como todo un desafío. Este equipo parece capaz de todo aunque la regularidad no es uno de sus fuertes.
En el cuarto parcial no cabían las dudas. O el todo o la nada. Igualado en los primeros puntos, el Río Duero, siempre por detrás, se puso a comandar el set y el Unicaja pidió tiempo para reconducir la situación. La ventaja adquirida la mantuvo pese a los intentos del conjunto andaluz por procuarr cerrar el partido. No lo consiguió y otra vez, entre los errores de saque de ambos equipos y el trabajo conjunto de los efectivos celestes el partido se prolongó hacia el desempate. Otra vez en lo alto de la montaña rusa.
El quinto y definitivo parcial tomó el mismo guion de alguno de los anteriores disputados: igualdad y mínima ventaja para Unicaja hasta el 6-6. A partir de ese momento, los celestes armaron un bloqueo contundente con Igor Silva y aprovecharon los remates definitivos de Salvador, Osorio, que cerró la victoria con dos saques directos. En un partido de idas y venidas, el Río Duero se anota un gran resultado para armarse de moral y mejorar su clasificación.