Heraldo-Diario de Soria

SANIDAD

Agotado el stock de cigarros electrónicos

Un hombre fuma un cigarro electrónico en la barra de un bar en la capital soriana. / ÁLVARO MARTÍNEZ-

Un hombre fuma un cigarro electrónico en la barra de un bar en la capital soriana. / ÁLVARO MARTÍNEZ-

Publicado por
JAVIER MARTÍN
Soria

Creado:

Actualizado:

Con la reciente puesta en marcha de la ley antitabaco los fumadores han tenido que cambiar buena parte de sus hábitos, y a la alternativa de dejar de fumar o acabar sus copas pasando frío en la puerta de los bares, se suma ahora el consumo del cigarrillo electrónico, que desde el 1 de enero está arrasando en las farmacias.Se trata de dos modelos, uno desechable, que cuesta en torno a los 15 euros,  y otro al que se le pueden incorporar cargas, cuyo precio asciende a los 90 euros.

 

Según informaron los farmacéuticos consultados el que más éxito está acaparando es el cigarrillo desechable, si bien del cigarrillo de cargas, el caro, desde la empresa Aliance Helker, la distribuidora en Soria, declararon que «se ha agotado el stock en Soria, se han distribuido cerca de 20 desde el 1 de enero. Trabajamos a demanda y al finales de mes se habrán vendido más de 50».

 

El presidente de Asohtur (Agrupación Soriana de Hostelería y Turismo) declaró que «no hay ningún problema en consumir este tipo de cigarrillos en los bares, ya que lo que se expele es vapor de agua».

En esto mismo coincidieron desde la Consejería de Sanidad de la Junta: «No está prohibido consumir estos cigarrillos en los bares ya que no se expulsa nicotina».

 

Con el cigarrillo electrónico se produce la sensación de estar fumando a través de la inhalación y exhalación de vapor de agua mezclado con aromas que pueden ser de tabaco, menta, vainilla, manzana, fresa o café. Según informaron desde la empresa distribuidora del cigarrillo en Soria, con este sistema «ya no se fuma», sino que se toma vapor.

El cigarrillo electrónico que se dispensa en farmacias no contiene nicotina ni puede contenerla porque en ese caso sería considerado un medicamento. De este modo el  cigarrillo no constituye un método terapéutico para dejar de fumar, pero puede ayudar a calmar la ansiedad del fumador.

 

Según apuntaron los farmacéuticos puede ayudar a los llamados fumadores sociales o con dependencia psicológica del cigarrillo (no así a los que presentan dependencia física de la nicotina), es decir, a aquellos que necesitan tener algo en la mano.

 

(Más información en la edición impresa)

tracking