SORIANOS POR EL MUNDO
Un flechazo con la Ciudad Eterna
Luisi Valdivieso tiene un idilio con la ciudad de Roma. Desde muy pequeña su sueño fue vivir en la Ciudad Eterna y hoy dice sin complejos que está «enamorada» de la capital italiana. Esta soriana nacida en Navaleno aprovechó la oportunidad que le brindó su instituto para pasar tres meses del curso pasado en Roma en un programa de intercambio.
La experiencia fue tan positiva que este verano ha vuelto. «Fue una experiencia increíble, conocí gente maravillosa, aprendí muchísimo italiano y me enamoré de esta ciudad», comenta. «Para mí Roma es perfecta», resume esta soriana que añade «adorosus calles pequeñas en las que ni siquiera cabe un coche, su suelo mal puesto en el que dejas los tacones cuando sales de fiesta, su olor a antigüedad, su gente con sus gritos y sus locuras cotidianas, sus jardines, sus fuente, sus monumentos por todos los lados, su caótico tráfico, sus helados, su pasta y sus tiramisús, su colorido, la adoro. Roma transpira belleza, recuerdos, amor».
Esta soriana lo tiene claro, «si tenéis una oportunidad como la mía, nunca la dejéis escapar. En la vida hay que dejar el miedo y los prejuicios de un lado y arriesgarse, si no arriesgas no ganas, y os aseguro que yo, desde que viene aquí por primera vez he ganado mucho». Luisi reconoce que son ciertos muchos de los tópicos que hay sobre Roma, pero «¿qué sería de un país sin sus tópicos o sus manías?». «Antes de venir todo el mundo me decía ‘ya verás cuanta pasta vas a comer’, ‘cuidado con los italianos que son muy de regalar el oído’ .... Y sí, como mucha pasta, todos los días al menos una vez se come pasta, y sí, los italianos regalan mucho el oído, sobre todo a las españolas, les encanta. También es verdad que en Italia se hacen los mejores helados del mundo y que los italianos se interesan mucho por la moda», explica.
La vida en Roma no tiene secretos para Luisi que puede considerarse como una romana más. Su día comienza a las 6.00 horas cuando se levanta para ir a clases «en moto obviamente porque en Roma es prácticamente imposible ir en coche, y más si tienes prisa». Después de comer esta soriana va a la piscina a entrenarse ya que practica la natación sincronizada. Es una actividad que hace todos los días salvo los miércoles cuando se dedica a enseñar a nadar a niños de entre 3 y 6 años.
Cuando tiene tiempo libre Luisi aprovecha para disfrutar con sus amigos. «Hacemos de todo, en Roma hay miles de cosas que hacer, pero como en una ciudad grande, pues vas al cine, a dar una vuelta por el centro, de tiendas, hay también un montón de museos para visitar, todas sus ruinas son de ver, hasta la más pequeña tiene una gran valor», indica. De momento Luisi no tiene pensado moverse de Roma. «¿Sabéis esa sensación cuando estás en un sitio y tu corazón te dice que es exactamente ahí donde tienes que estar? Pues eso me pasa a mí con Roma, sé que tengo que estar aquí. Igual dentro de un tiempo cambio de opinión, quién sabe si vuelvo a Soria o dónde me llevará la vida, pero ahora mismo, esta es la ciudad que me llena, la ciudad en la que me quiero despertar cada día y en la que quiero emprender proyectos de cara al futuro», manifiesta.
Aunque su amor por Roma es incondicional, Luisi admite que «sí que es verdad que le falta algo a esta ciudad» y añade «la alegría y el amor de mi familia, de mi maravillosa familia. Eso es lo primero que, sin duda, me traería a Roma».