EMPLEO
Soria pasa de ‘exportar’ a recibir trabajadores
Antes de la crisis había un salgo negativo de media de casi 600 contratos, mientras que a partir de 2008 entran más trabajadores de los que salen
La crisis ha dado un vuelco a la movilidad geográfica de los trabajadores en Soria. La provincia ha pasado de ser emisora de trabajadores, a receptora de mano de obra procedente de otras provincias. Se trata de un cambio de tendencia llamativo que aparece en el inicio de la crisis y se mantiene en los últimos ocho años. Así se desprende de los datos recopilados por el Observatorio de las Ocupaciones en el informe de movilidad, que realiza anualmente el Servicio Público de Empleo, Sepes, organismo dependiente del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
El estudio publicado recoge los datos en el mercado de trabajo relativos a contrataciones, como el total de contratos en una provincia (los de las personas que permanecen en ella más aquellos de las personas que entran); y los contratos que implican desplazamiento de trabajadores, entre otras variables. El balance, negativo o positivo, indica si la provincia es emisora o receptora. El saldo negativo es la diferencia entre el número de contratos que se realiza a los trabajadores que entran a Soria y el número de contratos que se hace a los que salen.
Durante los años de bonanza económica, la provincia registra un saldo negativo de 595 contratos de media al año, que rozan los 700 en el año 2004. Es decir, son más los contratos de sorianos que salen fuera a trabajar que los de otros ciudadanos que trabajan en Soria y tienen su domicilio en otras provincias. Ahora ocurre justo lo contrario, son más los que entran que los que salen. En 2007, el saldo, también negativo, fue de 401 contratos.
Por su escasa población, Soria está entre las provincias con menor presencia en desplazamientos por motivos laborales, junto con otras como Teruel y Segovia. Pero las tasas que presenta muestran conclusiones de interés, como es el nivel de dependencia que tiene una provincia de trabajadores foráneos.
La movilidad geográfica por motivos laborales cambia en Soria coincidiendo con los primeros reveses de la crisis. A partir de 2008 son más los contratos de trabajo de personas desplazadas a Soria que tienen su residencia en otra provincia, que las contrataciones en otro territorio que implican el desplazamiento de sorianos. En ese ejercicio hay un saldo positivo de 250 contratos.
Con algún año de bajón, sin llegar a presentar un saldo negativo, la movilidad laboral hacia dentro no deja de crecer hasta llegar al pasado año. En 2014 se registran en Soria 5.859 contratos de personas domiciliadas fuera, frente a 3.667 contratos de personas con residencia en Soria desplazadas a otra provincia para trabajar. El saldo positivo es de 2.192.
El pasado año la tasa de entrada rozó el 21% lo que la sitúa entre las provincias con mayor porcentaje de entradas, teniendo en cuenta que el total de contratos fue de 28.046. De ellos, 22.187 permanecieron en la provincia. La tasa de salida fue del 14,18%.
Una elevada tasa indica que el peso de las entradas y salidas es elevado en relación con el número de personas que permanecen en la provincia. Es por ello que tanto provincias emisoras con receptoras, tienen una elevada tasa de movilidad.
La tendencia con los contratos a extranjeros es la misma que con los nacionales. El Sepe contabiliza en la provincia el pasado año 1.133 contratos a extranjeros domiciliados fuera y 905 contrataciones de extranjeros con domicilio en Soria y trabajando fuera.