Heraldo-Diario de Soria

QUINTA ESQUINA

Amador Marín: "El Santero parece ambientado ayer"

«No hay que pensar que somos el ombligo del mundo» / «En las asociaciones hay gran fuerza y energía» / «Tardelcuende saca pecho cada vez más de Gaya Nuño»

Amador Marín-DIEGO MAYOR

Amador Marín-DIEGO MAYOR

Publicado por
Soria

Creado:

Actualizado:

Preside una dinámica asociación cultural y reivindica las pequeñas cosas de los pequeños pueblos y el quehacer personal y diario. Que la asociación se llame Gaya Nuño es el argumento para recordar al intelectual y crítico de arte, además de al autor del Santero en el 40 aniversario de la muerte de este soriano ilustre. Amador Marín Gutiérrez (Tardelcuende, 1968) habla de la vigencia del escritor y también del compromiso y de los ‘ismos’ que hay en su vida.

Pregunta.-Ordene por importancia: municipalismo, humanismo y sorianismo.

Respuesta.-Añado familia, que es la primera. La segunda sería humanismo, después sorianismo y municipalismo. No hago del municipio mi ombligo.

P.-¡Qué empuje el de las asociaciones vecinales!

R.-Si funcionaran bien serían un gran motor. En las asociaciones hay una gran fuerza y energía que se podría utilizar para mejorar la convivencia y muchas facetas de la vecindad. El problema es que gran parte de las asociaciones, a nivel local, pierden esa fuerza que tienen por falta de personas que tiren del carro. Al final la gente se cansa y esa energía se pierde por falta de empuje. (¿Falta compromiso?) En parte sí.

P.-Algo censurable.

R.-El pasotismo. Esperamos que todo nos lo den hecho. Y no queremos ser nosotros parte de ese cambio del mundo. Esperamos que las administraciones nos arreglen todo y después criticamos. Pero somos incapaces de colaborar unas horas en hacer que las cosas mejoren.

P.-Haga honor a su nombre y conjúguelo en primera persona.

R.-Yo amo... la vida

P.-El santero observaría desde la ermita. ¿Desde donde observaría Soria con ojos críticos?

R.-Un gran entorno para verla es la sierra de Santa Ana. Se ve gran parte de la provincia; lo pequeños que realmente somos y lo grandes que podríamos haber sido.

P.-Escuche... «El papanatismo, el sorianismo, hace al soriano xenófono y chauvinista, pueblerino y grosero, pequeño y mezquino». (Gaya)

R.-No hay que pensar que somos el ombligo del mundo, hay que tener una mirada más hacia fuera... Es lo que decía Gaya Nuño en el Santero. Seguimos mirándonos demasiado hacia dentro... Nos quejamos pero no hay una verdadera fuerza interior que intente cambiar las cosas.

P.-¿Está trasnochado el libro?

R.-Creo que en nada. Cada vez que lo lees parece que estuviese ambientado ayer. En vez de estar ambientado en los años 50, pudiera estarlo hace dos, prácticamente todo sigue muy parecido. Ambientes, bares, calles... todo es muy parecido.

P.-¿Qué se cuestionaría hoy Gaya?

R.-Posiblemente los sistemas de Gobierno, la burocracia... Gaya Nuño era muy crítico en la medida que le dejaban serlo. Y ahora tampoco estaría muy conforme con los sistemas de gobernanza, ni de derechas y de izquierdas, sino de la cantidad de administración y burocracia...

P.-Usted es concejal, ¿qué le hace falta a la política municipal?

R.-En general compromiso. En los pueblos parece que el alcalde es quien tiene que tomar las decisiones. Y creo es una cosa equivocada. El Ayuntamiento es todos los vecinos. No solo los concejales.

P.-¿Le basta un Me gusta en Facebook o profundiza?

R.-Pocas veces doy un Me gusta. Ahora que está el abanico de posibilidades suelo dar una sombra o uno de los otros ticks.

P.-Ayúdeme a definir el compromiso de la asociación que preside.

R.-El de esta directiva es un compromiso grande de querer hacer cosas, actos, de tener algo cada semana que a la gente le haga salir de casa, que luego comenten, critiquen, hablen... Hacer pequeñas cosas para que la gente salga, comente y conviva, para que haya sociabilidad.

P.-Gaya era un humanista militante, ¿y usted?

R.-No sé. Soy activo, no me gusta perder el tiempo.

P.-¿Cuál de estas palabras es el Santero: una receta, un espejo, una sutil bofetada?

R.-Es un espejo de la sociedad soriana que existió y lo sigue siendo.

P.-¿A quiénes han llorado para arreglar la casa del escritor?

R.-A nivel asociación, es una casa municipal y podemos hacer poco, salvo apoyar al Ayuntamiento en las medidas que tome. Como concejal hemos llorado a la Diputación, la Junta, al Ministerio de Cultura y a todos los entes que pudieran mojarse un poco en colaborar. Con ello, la casa podría estar en unas condiciones más visitables.

P.-El santero quiso ser abad; Amador que ya es teniente de alcalde... (menea la cabeza) ¿a qué aspira?

R.-Hay que dedicar un tiempo a cada cosa. Si vas por si seguiré en política, te anticipo que no tengo ningún interés. Si estoy concejal, más que como político, es como colaborador para que se hagan cosas. Mis afanes políticos son cero.

P.-¿Tardelcuende saca pecho de Gaya Nuño?

R.-Sí, sí. Gaya saca pecho y cada vez más. Tampoco es que se le conozca enormemente pero se le empieza a conocer. Hay muchas cosas que no sabía, que había estado preso, ni que había sido crítico de arte.

P.-¿Qué se tiene que activar con urgencia?

R.-Nos faltan ganas de querer hacer cosas. Echamos horas viendo la tele, con las nuevas tecnologías...

P.-Hoy (21) es el Día de la Poesía. ¿Se atreve con un verso?

R.-Sabía muchos. Siempre me gustó Espronceda... «Con cien cañones por banda, viento en popa a toda vela, no corre el mar sino vuela...».

tracking