The Bellrays y Orgone encabezan el Enclave en su décima edición

El festival Enclave de Agua ya tiene cartel y novedades para la edición de este año, que se desarrollará entre el jueves 27 y el sábado 29 de julio. Entre los nombres hay hasta 16 propuestas destacadas a las que se sumarán los conciertos de mediodía, pero brillan con luz propia los estadounidenses Orgone y The Bellrays, así como el español Julián Maeso.

En el capítulo de novedades el listado es igualmente amplio, con la previsión de duplicar la superficie para acampar, una mayor implicación con el centro de la ciudad o la cobertura nacional que brindará La 2 en diferido y Radio 3 en directo, en este último caso todavía pendiente de cerrar las negociaciones.

El concejal de Cultura, Jesús Bárez, mostró la satisfacción por que se haya «consolidado un evento de trascendencia nacional» que ya alcanza la década de vida. «Queremos una mayor presencia del festival en la ciudad» para que «empape» las calles más allá de los escenarios junto al Duero.

Como viene siendo habitual, los conciertos y jams vespertinos se celebrarán en el escenario pequeño, denominado San Miguel, junto a la zona de columpios de San Prudencio. En las tres jornadas la actividad se trasladará a la zona más amplia en torno a las 23.00 horas hasta bien entrada la madrugada.

«Son grupos de primera línea, sobre todo los de última hora», apuntó Bárez. Además de «un nivel y una calidad extraordinaria» en lo musical, el evento estará acompañado de la ya tradicional feria de artesanía y zona gastronómica para que la visita se convierta en toda una experiencia. Las previsiones pasan por moverse en cifras similares a las de años anteriores, esto es, entre 25.000 y 30.000 personas.

Respecto a la ampliación del espacio de acampada, se está cerrando el acuerdo para utilizar otro espacio, de superficie similar al actual, cerca del aparcamiento de caravanas. Bárez destacó que hasta hace poco se ha estado utilizando para huertas, por lo que es un suelo más confortable para poder instalar las tiendas de campaña y supone duplicar la superficie.

Respecto al presupuesto se repiten las cifras del año anterior. La parte artística, incluyendo contratación o dietas, supondrá un gasto de 60.000 euros más IVA. La parte técnica, con equipos de iluminación, cabinas higiénicas o camerinos saldrá a licitación por el mismo importe. «Lo que más nos distingue de otros festivales, aparte del carácter ecológico, es la calidad de sonido, iluminación y vídeo», aseveró el responsable de Cultura.

En lo tocante al impacto económico, Bárez eludió dar cifras concretas pero sí «sabemos que a nivel de hostelería está prácticamente al 100%» e irradia a otras localidades. «Este año queremos más actividad en la ciudad, especialmente con los conciertos-vermú» en los que habrá tanto grupos locales como otros venidos de fuera. Tiene que haber una mayor integración en la ciudad y que hosteleros y comerciantes puedan beneficiarse un poco más». Además, para celebrar el décimo aniversario se prevé aumentar la difusión gracias a una revista que recogerá las nueve ediciones anteriores y el programa de la venidera.

Asimismo pronto se actualizará la web con los nuevos datos, así como el perfil de Facebook. El programa ya está aprobado por la Comisión de Servicios a la Ciudadanía, de forma que ya es oficial.

Bárez consideró que varios factores han permitido asentar un festival de música negra a orillas del Duero a pesar de que la ciudad no era referente en este sector. «Lo primero es la calidad musical de primer nivel», aseveró el concejal. A ello añadió «el entorno natural, que es tan atractivo que es casi el 50% del potencial. Tiene encanto y capacidad de generar buen rollo». El tercer factor es la climatología benigna a finales de julio que hace que «nunca se haya tenido que suspender ninguna actuación». Por último –pero más importante– citó «el buen ambiente. Nunca jamás hemos tenido un brote de violencia, ha habido una convivencia magnífica». Teniendo en cuenta que ya hay nueve ediciones en el haber y las cifras de asistentes, es desde luego destacable.

El responsable de Cultura destacó asimismo que «cada día hay un mayor número de usuarios de transporte público» desde el festival, lo que marca tanto un paulatino crecimiento de la afluencia como «un mayor respeto al entorno» al utilizar los autobuses.

De esta forma, ya están sentadas las bases para que el jueves 27, el viernes 28 y el sábado 29 de julio Soria vuelva a convertirse en el epicentro de la música negra de toda España. Como es habitual el festival será completamente gratuito, algo que añade aún más atractivo para los miles de visitantes que se desplazan hasta el Sotoplaya. Con pequeños flecos, como cerrar la nueva zona de acampada, la presencia de Radio 3 o la incorporación de más casas comerciales, el Enclave de Agua ya ha confirmado que se hace mayor.