Las ampliaciones de capital caen a mínimos históricos

 En mínimos históricos. Las sociedades mercantiles en Soria apenas obtuvieron durante el periodo contemplado entre enero y abril de este año un saldo acumulado que superó por poco los 5 millones de euros, dato que proyecta un notable retroceso general al registrarse una caída porcentual del 67,3% respecto al mismo periodo del año pasado, cuando se llegó a sumar una cantidad superior a los 15.5 millones de euros por ampliaciones de capital durante el mismo cuatrimestre.

Asimismo, el resultado interanual correspondiente al mes de abril, ahora publicado, es especialmente revelador, toda vez que las firmas de la provincia apenas captaron 260.000 euros destinados a ampliaciones de capital, un 53,4% menos que en el mismo mes de 2016, según los datos procesados por el Gabinete de Estudios Económicos de la agencia de rating Axesor.

Este desplome toma todavía más cuerpo si se pone en relación con los parámetros marcados de modo global en el conjunto de Castilla y León. La región presenta un comportamiento claramente menos bajista, al ceder ‘sólo’ el 26%, casi tres veces menos que lo que porcentualmente se cede en Soria.

Con todo el dato que acredita una reducción innegable no tiene exclusivamente una lectura negativa. En este sentido, Santiago Aparicio, presidente de FOES (Federación de Organizaciones Empresariales de Soria) y de Cecale (Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León), explicó a este periódico que la razón de este comportamiento puede estar en la búsqueda de un mayor equilibrio, y en una adaptación a los mercados, en busca de un mejor posicionamiento empresarial.

«Hay que tener en cuenta que puede tratarse de una respuesta que se produce después de casi una década de transitar por una crisis muy dura, en la cual las ventas bajaron, en porcentajes de los dos dígitos, por lo que hay que adaptar el capital social a las circunstancias que se dan en cada momento».

El caso de Soria, no obstante, comparte un espacio común con el resto del país, donde también se aprecia una tendencia creciente a la concentración de forma mayoritaria. Tanto es así que el comportamiento que se atisba en la provincia de Soria es un hecho que se da de modo muy similar hasta en otras 34 provincias de España, donde no se alcanzó el umbral de los 10 millones de euros a lo largo del mes de abril.

En este listado de territorios con menos captaciones económicas se encuentran las nueve provincias de Castilla León, siendo Segovia la que menos importe consiguió movilizar en toda España, con un exiguo saldo de 101.800 euros, la mitad del montante económico que registró Soria, que fueron repartidos entre dos únicas operaciones.

Las cantidades totales contempladas, que incorporan los importes canalizados por las sociedades mercantiles a través de ampliaciones de capital se observan en términos nominales, excluidas las primas de emisión, según los datos procesados por el Gabinete de Estudios Económicos de la agencia de rating Axesor, responsable del estudio. Esta misma firma también indica que en España el retroceso se situó en el 18,7% respecto al mismo mes del año pasado, siendo el dato más bajo para este mes desde la entrada en vigor del euro. El documento, que se ha elaborado procesado los datos obtenidos del Registro Mercantil, sobre la base de la totalidad de empresas que operan en España, permite tener un conocimiento más preciso, facilitando una visión exhaustiva del entorno, «que facilita la toma de decisiones empresariales tanto en la gestión del riesgo comercial, como en la optimización de recursos y desarrollo de clientes.»

En el detalle comparado mensual de Soria destaca el dato de este último mes de febrero. , periodo en el que apenas se consignó un saldo de 1,1 millones de euros. Esto supone un desplome espectacular, toda vez que en el mismo mes del ejercicio pasado se alcanzaron 11,2 millones de euros. A la espera de próximos análisis, sólo marzo, con 3,3 millones de euros contrarresta la tendencia provincial.

De las pérdidas acumuladas al ‘zen’ financiero

Santiago Aparicio interpreta que, junto a la búsqueda de un mayor equilibrio y de una necesaria adecuación a las exigencias de los mercados, cohabitan otras razones que también se circunscriben a la lógica empresarial. Por ello, y en clave de máxima normalidad, apuntó que esta menor captación económica de las empresas sorianas destinada a la ampliación de capital, «responde a una adecuación a las circunstancias».

A juicio de Aparicio, «todavía hay empresas, fundamentalmente pymes en el caso de la provincia de Soria, que según los informes pueden estar entre un 45 y un 70%, que aún están soportando una situación de pérdidas acumuladas durante muchos años, razón por la que se decide hacer una reducción de capital, porque en algunos casos era muy alto, en relación a las circunstancias que había antes de la crisis»

La radiografía resultante de este análisis indica que estos descensos importantes en la facturación, «muy acusados en algunos sectores, por encima del 50%, hacen que el acumulado año tras año, te obligue a ajustes necesarios, con los que se trata de equilibrar la situación de la empresa y adaptarte a las circunstancias del momento por haber tenido un capital social, en algunos casos, sobredimensionado».

Por ello la reducción de capital también puede servir para solventar problemas. «Bien de financiación o bien en cualquier otro aspecto que se pueda dar dentro de la empresa».

Cabe indicar que a lo largo de 2016 se alcanzó la cantidad total de 24,5 millones de euros, observándose una mayor actividad durante los cuatro primeros meses del año, que sumaron dos tercios de la cantidad total consignada en la provincia, con una notable caída en los ocho meses restantes del año, en lo que parece una tendencia que no se lleva camino de revertir este año según los primeros datos anuales.