La nieve complica la circulación en la zona sur y la Ágreda–Almazán

La nieve volvió a hacer acto de presencia por segundo día consecutivo. Aunque no fue especialmente copiosa, si dejó problemas para circular sobre todo por la zona sur de la provincia, en el área de Retortillo. Por la mañana varias carreteras habían aparecido cortadas pero a mediodía ya figuraban con uso obligatorio de cadenas.

Precisamente se requería la utilización de estos elementos de tracción (o de neumáticos de invierno) al cierre de esta edición en la CL–101 entre Ágreda y Almazán. Aunque había amanecido en buen estado, por la tarde la Dirección General de Tráfico (DGT) decretó el nivel rojo. Esto conlleva además la prohibición de circular camiones, vehículos articulados o autobuses, algo que afecta especialmente a esta vía donde suele ser habitual el tráfico pesado.

De hecho, a las 19.00 horas de ayer se activó la fase de preemergencia en las carreteras sorianas por parte de la Delegación del Gobierno en Castilla y León, por lo que es recomendable evitar los desplazamientos por carretera en la medida de lo posible y, si son imprescindibles, salir bien preparado.

Poco antes ya se había comenzado a embolsar camiones en la A–2, manteniéndolos en los aparcamientos habilitados por seguridad. También la A–15 requería circular con precaución. Aunque no pasaba del nivel verde, en determinados puntos la nieve había cuajado sobre el asfalto. En la misma situación se encontraba la SO–20, la variante de la capital.

Por la mañana habían amanecido tres carreteras cortadas en el suroeste, pero el cierre de esta edición una estaba limpia y en otras dos sólo se requería el uso de cadenas. Se trataba de la SO–160 entre Berlanga de Duero y Retortillo y de la SO–152 de Berlanga de Duero a Barcones. En la anterior nevada estas vías también estuvieron entre las más afectadas, por lo que en apenas un mes se han vivido dos episodios similares en la zona.

En la capital el retén se había activado a las 15.00 horas si bien en la tarde de ayer la situación era bastante tranquila. No obstante para la noche estaban previstas precipitaciones en forma de nieve y se mantiene la alerta amarilla.

Respecto a las precipitaciones, Arcos de Jalón recibió las más cuantiosas con 10,6 litros por metro cuadrado acumulados a media tarde. Era la cuarta localidad de la Comunidad con más agua. No obstante fue la única estación soriana de la Agencia Estatal de Meteorología en la que no heló. La Riba de Escalote, con 7,6 litros por metros cuadrado, Morón de Almazán, con 6,8 o Lubia, con 6,4 le siguieron en la tabla. La capital se quedaba en 3,8 litros.

La máxima fue para Ucero, con 4,4 grados, si bien fue un espejismo en medio de la tónica general de la provincia. Por ejemplo Soria no pasó del grado y medio, Lubia se quedó en tres décimas y en La Póveda la máxima se quedó bajo cero, con -0,2 grados.

La mínimas oscilaron entre los cero y los dos bajo cero, con una horquilla térmica mínima (en Almazul la máxima y la mínima se llevaban 1,2 grados) e idónea para que las precipitaciones cayesen en forma de nieve. La Póveda (-1,9) y Vinuesa (-1,6) fueron las localidades más frías de la provincia.