Heraldo-Diario de Soria

Asden reclama que los partidos «se pongan de acuerdo como sea»

Los ecologistas recuerdan que la depuradora está en un punto «muy crucial» ante Europa

Depuradora de aguas residuales de la capital.-Luis Ángel Tejedor

Depuradora de aguas residuales de la capital.-Luis Ángel Tejedor

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JOSÉ ÁNGEL CAMPILLO
Soria

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«Hay cosas que son prioritarias» y la nueva depuradora no sólo lo es, sino también «imprescindible». Teniendo en cuenta esta premisa y la antigüedad del tema que se aborda, de muchos años, Asden considera urgente que los partidos y administraciones pacten ya un plan viable. «Que se pongan de acuerdo como sea», ya que «esto es un caso de necesidad», consideró el portavoz de la organización ecologista, Carlos González, en un momento en que la planta regresa con fuerza a la actualidad de la mano de una Proposición No de Ley (PNL) del PSOE para encontrar el apoyo del Gobierno y cuando socialistas y populares se han reunido con los partidos del grupo mixto municipal, a los que han explicado la situación. Asden, por su parte, se dirigirá al Ayuntamiento para exponer su punto de vista.

Los ecologistas estiman que el desarrollo de la planta se encuentra «en una situación muy crucial» ante Europa. Y es que la Directiva sobre depuración se está cumpliendo con firmeza, de manera que los municipios de más de 20.000 habitantes (caso de Soria) deben contar con una infraestructura capaz de realizar el tratamiento de fósforo. Justo lo que la capital soriana no cumple. Ya hay «sanciones» planteadas al Gobierno por incumplimientos y Soria está en la diana. El horizonte sería una «multa muy fuerte», que puede llegar hasta el punto de retirar por completo la subvención para depurar. «No tenemos ninguna base jurídica para alegar contra este tipo de sanción», aseguró González, quien temió que las multas serán repercutidas por el Gobierno a los municipios infractores [desde el punto de vista municipal, la declaración de interés general protegería contra esta eventualidad, al ser la planta responsabilidad del Estado]. El portavoz de Asden advirtió sobre las consecuencias de «cuando venga Europa con la estaca».

Para los ecologistas, la nueva depuradora tiene que llegar acompañada además de otras medidas, relacionadas con el ciclo del agua. En este sentido, recordó González, el vecino de la capital paga un mínimo de consumo y depuración de 40 metros cúbicos, al que no es frecuente llegar. Con ello se está «incitando a derrochar agua». Por ello abogó por «tramos crecientes». La «derrama» en el recibo que se aplicará a los vecinos para recuperar la inversión en la planta debería hacerse sobre la base de esta reforma previa de la tarificación.

Asden también ve algunas dificultades de gestión a la hora de potabilizar. Con el buen tiempo el agua «tiene sabor», algo que no debería ocurrir. Será potable, pero muchos optan entonces por comprar agua embotellada, lo que a juicio de los ecologistas supone un «sobrecoste» sobre algo que ya se está pagando.

Desde el punto de vista de lo sucedido en los últimos años, Asden llamó la atención sobre el hecho de que ha habido gobiernos del PSOE y del PP, sin haberse llegado a un resultado. Por ejemplo, han perjudicado al proyecto los cambios de ubicación (en Soria, en Los Rábanos en una u otra margen, en la carretera de Quintana), un «peloteo» que pareció parar cuando se designó un suelo aguas abajo del embalse de Los Rábanos, que llegaba con la amenaza de «litigio», pese a lo cual se mantuvo la elección. De manera que «cuando se quisieron dar cuenta había que hacer la depuradora ‘en cuatro días’», sobrepasando los plazos de las ayudas. Que no haya planta fue «por incapacidad política de unos y otros».

El PSOE presenta la PNL

Por otra parte, tal y como estaba previsto, el PSOE registró la Proposición No de Ley para recabar la colaboración del Gobierno en la depuradora. En concreto, «comprometiéndose con partidas presupuestarias a participar en la financiación» y «garantizando su colaboración con los ayuntamientos afectados en una infraestructura declarada de interés general». El texto, que será debatido en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, reclama que se desbloquee «de manera inmediata la construcción» de la planta «para Soria y su alfoz» y que la obra se realice y ponga en funcionamiento antes de que acabe el periodo 2014-2020 de financiación europea. El mecanismo que proponen los socialistas pasa por que el Estado aporte «fondos propios» que completarán los europeos.

«El objetivo es que las aportaciones que los vecinos y las vecinas deban realizar para la finalización de esta infraestructura no sean superiores a las realizadas por los usuarios en otros territorios», señala la PNL. Al interés general declarado por la Ley de Presupuestos de 2010 el PSOE añade en su justificación «el grave problema de despoblación que sufre la provincia de Soria como consecuencia de la falta de inversión pública en infraestructuras y servicios públicos, además de las condiciones especiales de vertido al tratarse de un espacio declarado ‘zona sensible’». Con esta catalogación los socialistas recuerdan el coste añadido en los tratamientos de depuración, ya que Soria se encuentra en cabecera de cuenca, lo que conlleva mayor exigencia.

La PNL hace un amplio repaso cronológico de lo sucedido en el anterior periodo de fondos europeos, del que se desprenden «que las decisiones que ha venido tomando el Gobierno de España en los últimos años han perjudicado claramente a los vecinos y vecinas de Soria y su alfoz», hasta llegar al rechazo de Soria y Golmayo a firmar el acuerdo último de 2014, cuando el porcentaje de financiación de la UE era del 80%. En la actualidad el escenario de fondos es del 35%, ante el que el PSOE reclama un añadido estatal.

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