Heraldo-Diario de Soria

El Consistorio subasta en 5.200 euros las vitrinas del mercado provisional

La enajenación no abarca a todos los elementos de Concepciones, un conjunto de materiales que muestra una fuerte depreciación, ya que ha perdido el 90% de su valor

Mercado provisional de Concepciones.-Valentín Guisande

Mercado provisional de Concepciones.-Valentín Guisande

Publicado por
JOSÉ ÁMGEL CAMPILLO
Soria

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El mercado provisional comienza a vaciarse de los elementos útiles. O al menos comienzan los trámites para que así sea. El Ayuntamiento licita de momento la enajenación de las vitrinas, un lote único que sale con una base de 5.200 euros. Se trata de dos elementos de panadería de dos metros y otros 12 frigoríficos que oscilan entre los 2,5 y los tres. El único criterio para adjudicar la subasta es el del mejor precio. Una vez designado, el adjudicatario tiene cinco días para realizar la transferencia.

Ya comentaba el equipo de Gobierno a mediados del mes pasado que los bienes aún útiles del edificio de Concepciones tenían una salida complicada. Las consultas con FOES y la Cámara de Comercio así lo confirmaron. El Consistorio no descartaba conducir los materiales al almacén por si en algún momento había algún comercio interesado en darles nueva utilidad.

Los cálculos municipales revelan la fuerte depreciación de las vitrinas. Entre la antigüedad y el uso, el presupuesto base refleja una pérdida de valor del 90%. Así, los 14 aparatos costaron inicialmente casi 48.600 euros. Siete años prestaron servicio en Concepciones, después de que el edificio que acogió a los comerciantes de abastos durante las obras de Bernardo Robles inició su actividad en 2011.

Las 14 máquinas que salen a subasta componen una parte del inventario del inmueble. Se completa con cinco evaporadoras de techo para cámaras y cuatro cámaras frigoríficas. Sumando estos elementos a los que el Consistorio desea enajenar, resulta que esta clase de equipamiento costó en su momento 66.600 euros. La valoración actual reduce su valor a 7.100.

La venta no había sido descartada por el Ayuntamiento, pero barajaba una segunda vida para las cámaras, gestionando de manera directa con emprendedores la nueva etapa. En septiembre se explicaba el escaso rendimiento económico de una subasta, teniendo en cuenta la obsolescencia y la clase de materiales existentes. Al final, las vitrinas se ponen a disposición de los licitadores.

La operación en curso es necesaria dada que el inmueble con forma de estrella está llamado al desmontaje. Costó 1,2 millones en su momento y siempre se pensó en una instalación provisional. Su permanencia con otra utilidad hubiera determinado una modificación del planeamiento, algo rechazado desde el principio.

Su destino más cercano pasa por el barrio de Santa Bárbara, donde prestará servicio como ludoteca y punto de encuentro juvenil. Posiblemente se emplazará en la parcela municipal que queda libre en Cabildo de los Heros. El Consistorio sigue así facilitando dotaciones a los barrios y se evita que el mercado sufra el deterioro que hubiera supuesto mantenerlo en el almacén municipal en piezas.

Esta opción resuelve la imposibilidad de contar con la idea inicial, que era desplazar la estructura a la actual cárcel. Es decir, al solar que quedaría una vez demolido el antiguo recinto, coincidiendo con la entrada en funcionamiento del nuevo y el paso del suelo a manos municipales. El retraso en la apertura del centro de Las Casas malogró este paso.

De momento, no hay fechas para la marcha del mercado provisional, que tendrá que realizarse en paralelo con el desarrollo de los planes para la nueva plaza de las Concepciones. Este céntrico espacio no recuperará su anterior función de aparcamiento, ya que está en el entorno de la peatonalizada Vicente Tutor y se espera prolongar este tipo de obras en Sagunto.

La solución funcional y estética llegó de la mano de la convocatoria de un concurso de ideas. La ganadora para redactar el proyecto (un contrato valorado en 25.000 euros) fue la titulada Lo esencial es lo invisible a los ojos. El jurado se decantó por ella dada su sencillez y puesta en valor del espacio. Especialmente tuvo en cuenta la propuesta para salvar la transición entre Vicente Tutor y Sagunto, dominada por un importante desnivel. «Asume con cierta naturalidad la topografía del espacio sin intentar imponerse a ella, casi reivindicándola como una condición identitaria de esa parte de la ciudad», señalaba el fallo del jurado. En la decisión también pesaron cuestiones como la vegetación arbórea y la variedad de materiales. A la espera de que se publiquen las conclusiones del proyecto, en su día se estimó la obra en 250.000 euros.

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