PSOE y PP respaldan el convenio de la depuradora

El Pleno del Ayuntamiento de Soria aprobó ayer la adhesión del municipio al convenio financiero con Acuaes para la construcción de la nueva depuradora de la ciudad en el paraje de Sinova (Los Rábanos). De la misma forma se aprobó el convenio de tratamiento con el municipio de Los Rábanos. El acuerdo salió adelante con la suma de los votos del PSOE y el PP, pero con la oposición de los tres partidos que integran el grupo mixto (Cs, IU y Sorianos). El alcalde, Carlos Martínez, que de manera excepcional ejerció también de portavoz, destacó la importancia del acuerdo que deberá servir para poner en marcha una inversión de más de 50 millones de euros.

Martínez recordó en su primera intervención que el primer convenio para una nueva depuradora se firmó en 2006, con la Junta, cuando ya que advirtió la necesidad de mejorar las actuales instalaciones para dar cumplmiento a la normativa europea sobre la materia. El alcalde buscó que el convenio con Acuaes obtuviera el respaldo de todos los grupos recordando aspectos como la cuantía de la inversión –50 millones– o la «necesidad» de la infraestructura para el «futuro» de la ciudad. En este sentido pidió a los grupos «mirada larga» y un ejercicio de responsabilidad para «aprovechar la oportunidad» y dar «ejemplo» de consenso. «Se trata de una infraestructura en mayúsculas que hace ciudad», insistió. Martínez reconoció que se puede hablar de «muchas duda», pero advirtió de que «cualquier retraso puede hacer que pase lo mismo que con al anterior convenio», o lo que es lo mismo, que el proyecto pase a engrosar el listado de iniciativas pendientes.

Por parte del principal grupo de la oposición la palabra correspondió a José Manuel Hernando que desde el inicio dejó claro el sentido positivo de su voto. «Este es nuestro proyecto», explicó el edil. Aunque desde el grupo popular se aludió a la «certeza» de que la depuradora es una infraestructura necesaria también se alertaron sobre algunas «dudas» que planean sobre el proyecto como «la negociación con Los Rábanos, el «desconocido» proyecto del túnel, la falta de información sobre los «costes asociados» y el «alud» de obligaciones que podrían recaer sobre la Empresa Mixta del Agua. Hernando también cuestionó al equipo de Gobierno por el «coste» que finalmente repercutirá en los vecinos y rescató la crítica por los 12,5 millones que el Ayuntamiento ingresó de la Empresa Mixta y que, en opinión del PP, deberían haberse reservado para esta obra.

Las posturas más críticas llegaron desde los grupos minoritarios. El concejal de IU, Enrique García, incidió en aspectos económicos como que el recibo subirá un 40% a los vecinos durante 40 años o que instalar la nueva depuradora en el emplazamiento actual supondría ‘solo’ una inversión de 20 millones –el alcalde corrigió posteriormente ese dato elevando a 40 millones el coste–. Por estos motivos, desde IU consideran que la aprobación del convenio «puede esperar 3 meses» y que sea la próxima Corporación municipal la que tome la decisión definitiva. En una línea similar se movió el concejal de Sorianos, Luis Alberto Romero, que también acusó al PSOE de «electoralismo» y cuestionó el papel de Acuaes en el proyecto porque «nunca va a perder».

Por último, Jesús de Lózar, de Ciudadanos, centró su intervención en cuestiones técnicas y lamentó que el expediente no cuente con herramientas como la memoria justificativa. El edil de la formación naranja considera que «no hay obligación» de firmar el acuerdo con Acues y advirtió de que no se conocen los proyectos técnicos de la intervención. «Es una indeterminación absoluta», lamentó. Para Cs tampoco tiene sentido que el Ayuntamiento deba hacerse cargo de un aval de 2 millones de euros. «Somos siempre los paganos», insistió.

En su turno de réplica, Martínez apuntó que al PP «no le queda más remedio» que votar a favor del convenio teniendo en cuenta la participación de la Junta. «Sería la primera vez que contradicen a su partido», señaló. «Es un mal día para ustedes y un buen día para Soria», espetó a los populares. El alcalde desveló lo que denominó la «cláusula anti-PP» mediante la que el Ayuntamiento podrá retirarse del convenio sin represalias si en 10 meses no hay avances significativos en el proyectos. El regidor capitalino también intentó resolver las dudas y además de las explicaciones, animó a a la oposición a «leerse los informes». Martínez también afeó a los grupos que cuando el Ayuntamiento tenía que pagar el 65% del coste –antes de la entrada de la Junta– instaban a firmar el acuerdo mientras que ahora, que el Consistorio pondrá el 32,5% «les surgen dudas».

Los intentos del alcalde resultaron infructuosos con respecto a IU, Sorianos y Ciudadanos,. García manifestó que «siempre» había defendido que hacer la depuradora en Los Rábanos «era una barbaridad» e insistió en la subida del 25% del recibido. Luis Alberto Romero alertó sobre la necesidad de «actualizar» los precios y De Lózar se sumó a la corriente de que «no pasa nada» por dejar el convenio sobre la mesa «tres meses más».

Desde el PPse insistió en que las dudas no habían quedado resueltas, pero insistieron en que «pasaremos por alto el manifiesto contenido electoralista» y mantendrían su voto afirmativo al convenio «porque es un proyecto por el que hemos estado luchando durante años».

El alcalde de Soria cerró el debate buscando de nuevo la unanimidad, pero fue imposible. En un último intento, Martínez recordó a los grupos que aplazar la decisión tres meses y teniendo en cuenta la incertidumbre sobre la formación del próximo Gobierno central supondría que «podríamos perder prácticamente un año».