Las obras de la depuradora comenzarán en «dos semanas»
El inicio de los trabajos hará que no caduque la Declaración de Impacto Ambiental
Reunión, ayer en el Ayuntamiento de la capital, con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán.-Luis Ángel Tejedor
La mínima cantidad de obra, pero suficiente como para evitar posteriores líos y retrasos, comenzará en unos días. Previsiblemente en las «próximas dos semanas» comenzarán los trabajos de la depuradora, explicó ayer el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, lo que evitará que se produzca un fuerte impedimento administrativo. Es decir, la caducidad de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), lo que obligaría a revisar el documento o tramitar una prórroga. Esto llegaría en su caso el 12 de diciembre, pero «nuestra intención es no agotar el plazo», señaló Morán. «Iniciadas las obras, la DIA permanece vigente ‘sine die’», señaló.
Morán se entrevistó en el Consistorio con el primer teniente de alcalde, Luis Rey, y la concejala de Obras, Ana Alegre, a quienes detalló el estado del proyecto. «nOs preocupa extraordinariamente», refirió Rey, el «avance» de la tramitación y «que salga adelante» cuanto antes. La depuradora no sólo moviliza una importante inversión, sino que también es esencial desde la perspectiva de la calidad del cierre del ciclo del agua, en un momento en que la capital quiere destacarse como un «ejemplo de sostenibilidad».
En estos momentos se está a la espera que de la «Abogacía del Estado culmine el informe jurídico correspondiente», explicó el secretario de Estado, algo que se producirá en «próximas fechas» en «pocos días» en todo caso. Esto «daría pie a la iniciación de los trabajos previos». Se trata de la «preparación de los espacios de los emisarios», labor adjudicada mediante un «contrato menor», con lo que las labores «se pueden iniciar con carácter inmediato» una vez culminado el proceso relativo al informe.
Estos trabajos comprenden la preparación de la zona de campamento, la adecuación del camino a la boca Norte del emisario de Sinova y el desbroce del área afectada en la margen del río Golmayo. La empresa Construcciones y Obras Valbuena se encargará de ello por 40.000 euros.
La sociedad estatal Acuaes ha encargado la revisión del proyecto de la depuradora, una puesta al día necesaria tras haberse adjudicado la construcción en octubre de 2013. Su ubicación en Sinova ha encontrado la «reticencia» de la empresa Villar, debido a que considera que compromete la viabilidad de su proyección empresarial. El secretario de Estado de Medio Ambiente apeló a la necesidad de ser «absolutamente escrupulosos» en el procedimiento y el «respeto» a la seguridad jurídica de las partes implicadas. «En previsión de que se puedan producir reclamaciones» es preciso «respetar escrupulosamente los procedimientos», lo que evitará que «por querer ir más deprisa» se vaya «al traste» la planta. El emplazamiento en Sinova requiere de una expropiación que ha sido alegada. Pero «las alegaciones están resueltas» y otra cosa es que los afectados «no estén de acuerdo» en los términos. Algo que entra dentro de la «normalidad» en cualquier proyecto y que en esta fase administrativa no implica la posibilidad de una paralización cautelar. En cualquier caso, si persiste el desacuerdo en las alegaciones siempre queda «recurrir al ámbito de la Justicia», recordó Morán, quien explicó que el segundo procedimiento, el relativo a la construcción del túnel emisario está «liberado» del problema de las reclamaciones.
La depuradora tiene que estar finalizada en 2023 y se considera que hay margen suficiente.