Heraldo-Diario de Soria

Cuatro años de espera y un proyecto sin definir

La conclusión de la reforma del Banco está valorada en unos 5 millones aunque no habrá avances hasta que se forme el nuevo Gobierno

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J.S. /Soria
Soria

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El 2020 aparece como fecha clave para avanzar en muchos de los proyectos pendientes en la provincia. Uno de ellos debe ser el Banco de España. La reforma del emblemático edificio cumple ahora cuatro años completamente paralizada. El objetivo es que tenga un uso de carácter cultural, pero el proyecto aún no está completamente definido.

Hace ya 10 meses, el Ayuntamiento de Soria, a través de una resolución de Alcaldía, encargó la elaboración de un proyecto y la planificación de un centro cultural multidisciplinar en el antiguo edificio del Banco de España. El proyecto fue asumido por Ignacio Fernández Rocafort y supuso a las arcas municipales un desembolso de 14.776,03 euros. El plazo de ejecución era de 75 días por lo que el documento está ya en manos municipales.

La intención del Ayuntamiento, según comentó el alcalde Carlos Martínez, es dar traslado del proyecto al Ministerio de Cultura, aunque las numerosas citas electorales de 2019 y la ausencia de presupuesto del Estado bloquearon cualquier tipo de movimiento. Fuentes municipales incidieron ayer que se está a la espera de la formación del nuevo Gobierno para retomar el proyecto.

Hace un año el ministro de Cultura en funciones, José Guirao, con motivo de su visita a la capital para la inauguración de los cines municipales, explicó que a los 2,9 millones consignados en el proyecto de presupuestos se sumarían otros 2 millones en la anualidad de 2020, aunque esas cifras, ahora mismo, tienen carácter orientativo toda vez que el Congreso tumbó las cuentas presentadas por el Gobierno de Pedro Sánchez. De cara al uso del emblemático inmueble Guirao comentó que «estamos trabajando para que en ese lugar, no solo, pero se trabaja en la idea de un centro de Cultura y Territorio». Este espacio «intentaría dar soluciones, debates, alrededor de las zonas de España que se están despoblando». «Nos parece que Soria, por estar en esa problemática, sería el lugar ideal para este centro, estamos trabajando en la ida de buscar soluciones, proyectar, debatir para este problema tan grave que hay en España como es la despoblación de zonas rurales cada vez más grandes».

Fuentes municipales aclararon que el proyecto se complementaría con la participación de una entidad como Acción Cultural Española, que dotaría de contenido la parte expositiva del complejo. Además, a través de esa misma entidad, el edificio acogerá un laboratorio cultural donde se generarán iniciativas culturales adecuadas a la representación en municipios y localidades que no dispongan de recintos con grandes aforos. No obstante, el contrato adjudicado ahora será el que defina concretamente el uso futuro del Banco de España.

Desde el Ministerio, por su parte, guardan silencio. A través del portal de Transparencia, desde Cultura explicaron que «no se puede proporcionar la información relativa a un posible proyecto de uso cultural en este edificio vinculado al problema de la despoblación y las acciones culturales en territorios con problemas demográficos, por no disponer del mismo, sin detrimento de señalar en dicho informe actualizado que tampoco consta petición formal por ninguna otra administración pública de posibles cesiones de titularidad o uso de ese inmueble para un nuevo destino».

Desde Cultura si resumieron la situación administrativa del edificio del que consta una doble vinculación en el Inventario del Estado. Por una parte hay 3.502 metros cuadrados de las plantas principal y primera que iban a ser destinadas a sede del Catastro están sin destino definido de sus público y, por lo tanto, adscritos a la delegación de Economía y Hacienda de Soria. Por otra parte, formalmente están afectados al Ministerio de Cultura y Deporte los 1.498 metros cuadrados restantes, repartidos en una planta baja y planta sótano destinados a exposiciones temporales.

Asimismo, afirman que la «intención» de la Dirección General de Patrimonio es «buscar nuevo destino de uso público para el conjunto del edificio y que el Ministerio al que se le vaya a afectar todo el edificio se haga cargo de los costes de adecuación de la parte interior del mismo, que evalúan en torno a los 4 o 5 millones de euros». Por último, afirman que no hay petición «formal» de cesión del inmueble por parte de otra administración «para darle alguna finalidad cultural vinculada al problema del despoblamiento o otro tipo, petición que de concretarse se valoraría por el Ministerio de Hacienda con las consultas pertinentes al Ministerio de Cultura y Deporte si tuviera alguna relación el nuevo uso solicitado con las materias de la competencia de este departamento».

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