Heraldo-Diario de Soria

CORONAVIRUS

Los fallecidos en residencias se multiplican por cuatro en 72 horas

La Junta reconoce 16 fallecidos con Covid y otros 18 muertos con síntomas

desinfección residencia El Burgo

desinfección residencia El Burgo

Publicado por
HDS
Soria

Creado:

Actualizado:

La situación en las residencias de mayores y los centros sociosanitarios siguen siendo uno de los puntos críticos en la gestión del coronavirus. La provincia de Soria es una de las más afectadas a tenor de los datos ofrecidos por la Junta de Castilla y León que ayer amplió  sensiblemente la concreción de la información que hasta la semana pasada proporcionaba. La cifra, tristemente, más importante es que ya son 16 los fallecidos de residencias sorianas. En la anterior actualización, publicada el pasado viernes, el número de muertos era de cuatro por lo que el número de decesos en las residencias se ha multiplicado por cuatro en apenas 72 horas. 

La consejera de Familia, Isabel Blanco, detalló ayer que el departamento de Servicios Sociales ha «mapeado» el conjunto de residencias y centros asistenciales de la Comunidad Autónoma. A través de una aplicación, cada centro podrá actualizar sus datos cada mañana con lo que se podrá conocer de forma más pormenorizada la situación de estos complejos.  Blanco avanzó que ahora hay 47.264 personas en centros residenciales y solo el 5% (2.385) pertenecen a la provincia de Soria. 

Según la información difundida ayer por la Junta de Castilla y León en la provincia ya se contabilizan 16 fallecimientos por Covid-19 de personas que residían en alguna de los centros asistenciales de la provincia. El crecimiento en los últimos días es tremendo ya que el viernes solo se contabilizaban cuatro casos. Además, la Junta reconoce ahora que hay otras 18 personas que han fallecido «con síntomas compatibles» con el coronavirus. 

Las cifras son durísimas, pero hay que recordar que la verdadera  incidencia del Covid-19 no se podrá calibrar hasta conocer el número total de fallecimientos en estos centros y comparar esos datos con lo sucedido en años anteriores. Por ejemplo, la situación en Los Royales. El pasado martes la Junta reconoció que solo en 24 días de marzo se habían producido 21 muertes en este centro cuando en todo el 2019 se certificaron 38 defunciones. 

Además de las personas fallecidas, la Junta también facilitó información sobre el número de positivos ya confirmados. En el caso de Soria ya hay 92 residentes con Covid-19, 30 más que el pasado viernes. Los 92 positivos ‘sorianos’ suponen el 14,24% del total de positivos detectados entre residentes. Esta cifra vuelve a demostrar la alta incidencia en Soria ya que con apenas el 5% del total de residentes suma el 14% de positivos. 

En cuanto a los asilados, la nueva información de la Junta separa los aislados con «síntomas compatibles» y las personas en «aislamiento preventivo». En el caso de Soria hay 100 personas en el primero de los epígrafes y 621 en el segundo. En conjunto en la provincia hay 721 personas aisladas por las 5.969 de toda la Comunidad Autónoma, es decir, que el 12,07% de los aislados pertenece a la provincia de Soria que apenas tiene el 5% del total de los residentes de Castilla y León. Además, los 721 aislados de la provincia significa que ahora mismo hay un 30% de los usuarios de residencias de Soria están aislados, con o sin síntomas, es decir, que prácticamente un tercio de las personas que están en residencias de mayores o centros asistenciales están en situación de aislamiento. 

Matamala y Quintana

Dentro de las residencias municipales, la de Matamala de Almazán contabiliza siete positivos, según indicaron fuentes municipales. La prueba del coronavirus dio resultado afirmativo en siete de los ocho test que se realizaron en días previos y que se conocieron ayer. Estas personas presentaban y continúan con sintomalogía de coronavirus pero su estado no es grave, según aseguraron las citadas fuentes.

De este centro gerontológico han fallecido ya dos internos. Uno ya conocido, el sábado. Un hombre de unos 85 años que tenía sintomatología previa el cual estaba ingresado desde el lunes de la semana pasada. El otro fallecido es una de las dos personas que fueron hospitalizadas al día siguiente, martes, también con síntomas pero que entonces no se les había hecho la prueba. Se trata de una mujer, de edad avanzada y que era vecina del pueblo, que falleció ayer en la residencia de Santa Bárbara, donde seguía ingresada.

Los internos de la residencia, con 49 plazas, permanecen mayoritariamente en sus habitaciones, no en situación de aislamiento pero sin salir al exterior como medida preventiva.  Miembros del Ejército estuvieron ayer en Matamala donde llevaron a cabo labores de desinfección en la residencia y otros puntos del pueblo, según indicó el responsable municipal.

Por otra parte, cinco ancianos de la residencia de Fray Pedro Pastor, en Quintana Redonda, están en aislamiento severo y con tratamiento porque presentan síntomas compatibles con el coronavirus. Desde la dirección se sospecha que ellos y una trabajadora del mismo centro están contagiados, pero no se les ha realizado los test pertinentes para confirmar que se trata de casos positivos. Ante la posibilidad se han tomado medidas para evitar más contagios.

 Los 48 residentes en Quintana se encuentran aislados en sus respectivos dormitorios y se evita así el contacto entre ellos en espacios comunes en la residencia. Eso significa que el personal les facilita a diario los desayunos, comidas y cenas a sus habitaciones, lo que conlleva un trabajo extraordinario para el personal que trabaja en la residencia que también tiene que ayudarles en las tareas de aseo personal. Ha sido necesario que los empleados de la residencia se apoyen en tareas que anteriormente no realizaban.  Hace días que los ancianos de Quintana no se ven entre ellos, entre los que el confinamiento comienza a hacer mella y están tristes. El personal del centro intenta que tengan un contacto diario con sus familiares, bien a través de internet o con videollamadas, «pero todo esto se nos hace muy duro», explican responsables de esta residencia que necesita material como batas y mascarillas para el personal que atiende a las personas con síntomas.

SIN COVID-19

En medio de los datos negativos que llegan a diario desde los geriátricos de la provincia de Soria también hay una cara amable que la ponen aquellas residencias que están resistiendo al coronavirus y después de 15 días de confinamiento sus inquilinos y sus trabajadores están sanos. No cantan victoria porque todavía quedan muchos días para frenar esta pandemia que se está cebando con los mayores, como colectivo vulnerable. 

Los 112 ancianos de la residencia de Santa Cristina de Osma ayer se encontraban perfectamente, según aseguró a HERALDO DIARIO DE SORIA una de las religiosas que se encarga del funcionamiento del centro.  Cuando empezó la alarma y se comenzaron a conocer los efectos de esta pandemia es cuando comenzaron a tomar medidas en Osma. Desde entonces en el interior se procura a diario que los residentes guarden las distancias y están lo más separados posibles en la salas. Únicamente entra a diario el personal que trabaja en la residencia, ni visitas, ni proveedores acceden al interior por seguridad, así como se extreman  las medidas de limpieza. 

En las residencias de Arcos de Jalón y Medinaceli el coronavirus tampoco ha entrado y los 123 residentes de Arcos y los 8 de Medinaceli están bien. Además, la tibia primavera de la que se ha disfrutado este fin de semana ha permitido a algunos salir a un enorme patio interior del que dispone el edificio de Arcos  a realizar actividades al aire libre, guardando las distancias de seguridad, según explicó el director Javier Sanz. «Llevamos 24 años trabajando en el sector  y cuando vimos lo que estaba ocurriendo sabíamos que iba a ser una catástrofe» indicó, por lo que se tomaron medidas, como la prohibición de las visitas semanas antes del estado de alarma y «la experiencia ha sido positiva», puntualizó, porque ahora todos los residentes se encuentran bien.  A pesar del confinamiento, el personal de la residencia procura que los ancianos estén activos a lo largo del día. Se han eliminado las terapias de grupo y ahora se realizan de manera individual y a la vez se comunican a diario con familiares, a través de videollamadas, que confirman que los ancianos se encuentran en perfecto estado.  

La residencia de la Virgen de Olmacedo, de Ólvega, es otra de las que el Covid-19  no ha entrado. Los 37 residentes y los 17 empleados que los cuidan están bien, como así lo confirmó ayer su directora, María Pol. Se toman temperaturas a diario y se mantienen las distancias de seguridad. Se han implantado unos turnos en el comedor para que no coincidan todos a la misma hora y también se han suprimido todas las actividades comunes, pero se mantienen aquellas que son psicoafectivas. Todos los viernes salen a aplaudir a las ventanas para que los puedan ver sus familiares y desde el centro las videollamadas son continuas y constantes desde que comenzó el confinamiento. María Pol lo tiene claro: «Seguimos luchando por ellos y no los vamos a dejar por la edad que tienen, ellos son los que nos están enseñando a luchar». 

tracking