La pandemia suma 20 positivos y añade un brote hasta llegar a 17
Las cifras aumentan, los colores con que se representa la evolución de las zonas de salud se enrojecen paulatinamente indicando una mayor incidencia pero no se dan las condiciones, de momento, para confinar áreas. La delegada de la Junta en Soria, Yolanda de Gregorio, descartó confinamientos en el día de ayer, aunque la situación es variable y podría llegarse a recurrir a la drástica medida para evitar la propagación. Pero en la actualidad no se da el requisito esencial para encerrar zonas: la transmisión comunitaria cuya sospecha ha llevado a limitar la movilidad y horarios en Íscar, Peñalba de San Esteban y Aranda de Duero. «Ahora mismo y en este momento» no está algo así sobre la mesa para Soria, señaló la delegada de la Junta.
«Ahora mismo en la provincia de Soria no hay transmisión comunitaria y por tanto no hay confinamiento», insistió. Otra cosa es que si la tendencia «empeorara, se podría plantear». De momento hay que transmitir, «tranquilidad, prudencia», porque «no hay transmisión comunitaria y no hay ninguna intención ahora mismo de llevar a cabo ningún tipo de confinamiento».
La transmisión comunitaria viene a representar el instante en que se rompe la trazabilidad de los contagios, cuando hay casos en los que la labor de los rastreadores queda inutilizada porque no es posible seguir la cadena. No sólo se trata del número de personas afectadas, indicó De Gregorio, sino de otros parámetros como la edad de los enfermos o lo que más «preocupa», la ocupación hospitalaria. En el hospital Santa Bárbara la cifra se mantiene estable, con diez pacientes en planta y ninguno en la UCI.
De Gregorio hizo estas manifestaciones en una rueda de prensa previa a la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (CECOPI), con los responsables de todas las administraciones y que ayer contó con la presencia de la directora de la Agencia de Protección Civil, Irene Cortés. En el encuentro con los medios adelantó la última cifra de casos detectados. Se trata de 20 nuevas situaciones, que se agregan a las 37 contabilizadas entre el viernes y el domingo. La estadística contempla un brote más, de manera que se llega a los 17.
Debido a las condiciones de vuelco en el sistema regional, los 20 de ayer no estaban sumados al total de la Comunidad. La estadística anotaba los 37 comunicados en la víspera y que no habían sido contabilizados. Con ello, figuraban en el portal de la Junta 41 afectados más, teniendo en cuenta que el lunes constaban cuatro. Estos desajustes en el portal son corregidos con la comunicación de datos propios y actualizados por parte de la Delegación Territorial. En cuanto a la veintena que refirió De Gregorio, la mayor parte presentaba síntomas.
Así, 15 de los 20 ofrecía señales de estar pasando la enfermedad y cinco, con carga viral, no daban muestras de ello. Los 20 son un «dato significativo y que nos preocupa y que estamos trabajando en ello», aseguró De Gregorio, quien destacó que «la situación está, en principio, controlada».
De los 20 positivos reportados, 16 «son producto de contactos», o sea, del seguimiento de los rastreadores tras haberse detectado al enfermo y haber ofrecido este las personas con las que estuvo en relación cercana como para haber podido contagiar. Osea, que «no son brotes aislados, son gente que ha tenido una serie de contactos». En la actualidad, la media de gente contagiada tras haber estado en relación a un positivo es de 3,68.
Desde este punto de vista y no sólo el de las cifras globales la situación está empeorando. Del 12 de mayo al 30 de junio, informó De Gregorio, la media era de 2,96. Desde el 1 de julio al 9 de agosto ha crecido hasta 4,8.
Si el confinamiento se mide entre otras cuestiones por la edad media o la gravedad de los casos, parece que en Soria, con los datos en la mano, aún no se han dado tales circunstancias. Los mayores suponen el grupo de riesgo más acusado, pero ahora la edad media de los casos positivos se encuentra lejos de la ancianidad. De hecho, se sitúa en los 35 ó 36 años. Un 49%se vincula a las mujeres.
En cuanto a la necesidad de hospitalizar, si la progresiva elevación no se ha notado demasiado en los hospitales se debe a las características con que mayoritariamente parece manifestarse la enfermedad. Salta con «síntomas de una carga viral muy bajita», con «fiebre, malestar, no es lo que había anteriormente», tranquilizó la delegada.
El rastreo, la búsqueda de contactos y las cuarentenas también tienen que ver con que la pandemia no esté desbordada. Desde el 20 de julio, refirióDe Gregorio, se han practicado 3.082 pruebas PCR, de las que 217 han dado un resultado positivo.
Otros frentes contra la enfermedad se encuentran en las residencias de mayores y la prevención con refuerzo de medios. Se ha realizado un «doble cribado», contó la delegada, y «no tenemos ninguna residencia ahora mismo en esa situación en que podamos decir que hay personas que estén afectadas por covid». Las comprobaciones han dado «resultados muy buenos» y «nos están diciendo que hay gente que ya lo ha pasado». Además, «cuando hay algo que se detecta, rápidamente se proceden a activar los planes de contingencia y los planes de actuación».
Esto, sobre las residencias. Acerca de la implantación de más recursos, hay que tener en cuenta que se trabaja en dotar al hospital de cuatro plazas más de UCI, cuyas obras está previsto que finalicen en septiembre. En personal, se cuenta con 115 enfermeras más (unas 40 en Atención Primaria y 75 en Especializada, refirió la delegada). El número actual de rastreadores asciende a 40, una de las provincias con mayor proporción por número de habitantes, algo «muy destacable».
Por zonas de salud, al ir con retraso el sistema regional en relación a la actualización de la Delegación, no es posible precisar las cifras. No obstante, lo que manifiestan los mapas es preocupante, ya que la mayor parte del mapa provincial aparece en naranja, lo que indica una incidencia mayor de cinco casos por 10.000 tarjetas sanitarias. O sea, desde el punto de vista de la proporción al borde del confinamiento, aunque el criterio sigue siendo el de la transmisión comunitaria.
De los 20 casos indicados ayer, la capital congrega 11 en sus dos zonas de salud. El resto se distribuye entre San Leonardo (uno); Gómara (dos); Soria Rural (dos), Berlanga de Duero (uno); y tres desplazados. Hay dos menores de edad involucrados, de dos y 17 años, uno de ellos con síntomas.