GASTRONOMÍA
Los 11 mejores lugares donde comer el torrezno de Soria
El Torrezno de Soria se ha convertido en un emblema de la gastronomía. ¿Dónde comer el mejor? Dejamos 11 propuestas, pero la provincia ofrece muchas más para chuparse los dedos.
El Torrezno de Soria ya se ha convertido en todo un emblema de la gastronomía de la provincia. HDS
Soria y el torrezno, el torrezno y Soria. El idilio entre la provincia y uno de sus productos emblemáticos ya es indisoluble. Los sorianos lo comprueban cada vez que presumen de su origen fuera de su tierra. "Anda, como el torrezno". Pero, ¿dónde comer el mejor? Por aquí no están todos los que son, pero vaya que si son todos los que están.
A lo largo de los años el concurso del Mejor Torrezno del Mundo y la experiencia en la cata han ido destacando a una serie de establecimientos. Lo cierto es que en Soria es difícil equivocarse y son muchos más de 11 los que lo preparan estupendamente. No obstante, sabiendo que es también un enorme reclamo turístico, esta lista puede ayudar a establecer una ruta con 11 destinos para disfrutar de los mejores torreznos. ¿Sin planes? Pues sólo hay que ir uniendo los puntos o seguir algunas escapadas como la del Torrezno Raid.
Restaurante Antonio, San Esteban de Gormaz
. El último en incorporarse a la lista y el que suma ya los 11 lugares destacados por el concurso
El Mejor Torrezno del Mundo
Vicente
Juani
son los últimos el alzar el trofeo con
unos torreznos de corteza crujiente, carne tierna y veteado untoso
, proclamados como los mejores de 2023. En un concurso que gana participantes año tras año, son los vigentes campeones.
El Portalón de San Leonardo y La Tablada de Navaleno.
Ángel Ortego es el
actual campeón del Mejor Torrezno del Mundo
y por algo será. En el regreso del concurso, este cocinero con establecimientos en las dos localidades de Pinares
se impuso a competidores de media España
tras años en busca del ansiado premio. Lo mejor, que cualquiera puede comprobarlo, compartirlo y comer torreznos de campeonato.
Casa Augusto en Soria.
En 2020 los hermanos Arranz se alzaron con el galardón a través de su establecimiento Piscis, ahora bajo otra gestión. No obstante, en la misma
plaza Mayor de Soria
siguen preparando esos torreznos gruesos, jugosos por dentro, crujientes por fuera que hacen la boca agua
desde hace prácticamente medio siglo
Los hermanos Arranz llevan casi medio siglo trabajando el Torrezno de Soria. HDS
El Condado del Motores en San Pedro Manrique.
Algo saben de embutidos en las Tierras Altas de Soria y el torrezno no es una excepción. En San Pedro, además de un Paso del Fuego de Interés Turístico Internacional (casi nada)
utilizan la lumbre con maestría
para otros menesteres.
Muy cerquita de la Peñafría de la serie 'El Pueblo' (Valdelavilla)
ofrece el mejor sabor rural de Soria.
Los Torreznos de San Pedro Manrique se llevaron el premio a los Mejores del Mundo hace unos años. HDS
Taberna Mercedes.
En el polígono industrial Las Casas se encuentra este amplio restaurante que ha reinventado su carta, con tapas muy originales, sin olvidar su gran terraza en la que disfrutar de un buen torrezno en un ambiente muy cuidado y tranquilo. Además, ofrece la posibilidad de recoger el pedido en el establecimiento e incluso cuenta con servicio a domicilio.
El Hogar en San Leonardo de Yagüe.
No esperen nombres rimbombantes en las tapas y raciones, pero vayan con hambre, porque van a disfrutar de
los mejores sabores de Soria
. El
Mejor Torrezno del Mundo salió de allí hace unos años
y sigue conquistando a vecinos y visitantes. Y luego hay tapeo, micología recogida a apenas unos pasos y por tanto fresquísima... ¿Antes o después de darse un paseo por el pinar? Por suerte, ambas opciones son compatibles y recomendables.
La Chistera en Soria.
José Antonio y Cristina llevan más de un cuarto de siglo poniendo su magia en todo lo que preparan, y sus torreznos no son una excepción. Cocinados en dos fases, combinan la untosidad de su carne y la capita de grasa con una corteza rotunda.
En temporada de setas o trufas
merece la pena quedarse a probar un poco más. En 2019 se impusieron en la desaparecida
, porque efectivamente se puede crear a través de algo tan tradicional.
Cristina uy José Antonio, un brindis por la micología y el torrezno desde La Chistera. HDS
La Casa del Guarda en Valonsadero.
Si a comer un torrezno de altura se suma un entorno idílico, se pasa de la gastronomía a la experiencia. En Valonsadero,
cerca de Soria capital pero en plena naturaleza
, se preparan unos deliciosos bocados que se pueden tomar dentro o en una terraza con
inmejorables vistas sobre el Pico Frentes
. Para disfrutar sin prisa.
La Venta Nueva en la A-11/N-122.
Antes, muchos antes de que la Marca de Garantía distinguiese al Torrezno de Soria, la familia ya preparaba estos suculentos lingotes de panceta adobada y oreada como sólo saben los sorianos.
Ubicada en la carretera (a tramos autovía) que une Soria con El Burgo de Osma y Valladolid
, la hospitalidad compite en brillo con los torreznos.
Una paradita para descansar del volante
puede alegrar el resto del viaje.
Luis Arroyo, autor de torreznos como los de la imagen. Alabado sea. HDS
Bar Mesón Círculo en El Burgo de Osma.
Muy cerquita de la catedral, junto a los soportales tradicionales castellanos, reside
uno de los torreznos más aplaudidos de Soria
Jugosos y sabrosos
, son toda una invitación para quedarse a comer antes de perderse por las calles de la localidad, con sabor de antaño en ambos casos.
Y sí, en su casa.
Se puede conseguir un torrezno de campeonato en su propia cocina. En la
web de la Marca de Garantía Torrezno de Soria
y en numerosos vídeos están las instrucciones para lograrlo. Quizás no salga a la primera, pero productos como las bandejas de torrezno precortado y precocinado brindan la posibilidad de prepararlos de forma rápida y sencilla con aceite y mimo como únicas necesidades. De hecho, dos ganadores el concurso El Mejor Torrezno del mundo no fueron ni bares ni restaurantes. La Casa Rural la Prensa del Vino en Peñalba de San Esteban y la particular María del Carmen Barranco de La Cueva lo lograron. Merece la pena intentarlo con un aperitivo inconfundible antes de comer.